La rumiación es un fenómeno que afecta al 40% de personas alrededor del mundo, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), y es recurrente en las personas que viven con ansiedad. Pero, ¿qué es la rumiación?, ¿cuáles son los síntomas?
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*La siguiente nota expone datos científicos de distintas fuentes respecto a la rumiación y no pretende sustituir de ninguna manera un tratamiento médico. Ante dudas, recomendamos siempre buscar ayuda de expertos y especialistas.
¿Qué es la rumiación?
Según el Dr. Joaquín Mateu Mollá, doctor en Psicología Clínica y profesor adjunto en la Universidad Internacional de Valencia, "la rumiación es una experiencia común en las personas que viven sometidas a una ansiedad persistente, y en general se vive como una enorme dificultad para dejar de pensar sobre algún tema que es motivo de preocupación".
En detalle, se trata de pensamientos intrusivos de carácter negativo, sobre episodios del pasado, preocupaciones o escenarios que los angustian, lo que causa insomnio, afectando la calidad de vida de las personas.
¿Cuáles son los síntomas de la rumiación?
Mayo Clinic informa que algunos de los síntomas que pueden experimentar las personas que sufren de rumiación son:
- Regurgitación sin esfuerzo
- Presión o dolor abdominal por la regurgitación
- Sensación de saciedad
- Mal aliento
- Náuseas
- Pérdida de peso involuntaria
Complicaciones que provoca la rumiación
Como cualquier síndrome, la rumiación afecta al cuerpo de las personas, causando daño en el esófago e incluso desarrollando enfermedades.
- Pérdida de peso no saludable
- Desnutrición
- Erosión dental
- Sensación de vergüenza
- Aislamiento social
Tratamiento de la rumiación
Con el fin de terminar o aminorar los efectos de la rumiación, los tratamientos se basan en técnicas conductistas como relajación, biorretroalimentación, entrenamiento en respiración diafragmática, etc.
Asimismo, según Manual MSD, uno de los medicamentos utilizados son baclofeno, "pero los datos de inocuidad y eficacia a largo plazo son limitados. La consulta psiquiátrica puede ser de utilidad".
Consejos para mejorar el sueño por rumiación
Según la Universidad Internacional de Valencia, estos son algunos consejos que podrían ayudar con la rumiación:
- Aprender a relajarse: Respirar de manera controlada activa la rama parasimpática del sistema nervioso autónomo y genera sensaciones placenteras que inducen el sueño, mientras que la relajación muscular progresiva puede contribuir a que la sobrecarga física se acabe diluyendo.
- Tener higiene del sueño: El Mindfulness, o Atención Plena, son técnicas con las que podemos facilitar una mirada consciente a nuestros pensamientos sin dejarnos arrastrar por ellos hacia el abismo de la rumiación. El Mindfulness puede ayudarnos a evitar los juicios más negativos sobre nuestras rumiaciones, rompiendo la perversa cadena que nos mantiene indefectiblemente amarrados a ellos.
- Expresar nuestras preocupaciones: A menudo, relatar lo que ocurre adentro ofrece una oportunidad privilegiada de entendernos, con lo que la rumiación nocturna reduciría su insistencia o incluso desaparecería.