Las altas temperaturas, propias de esta época del año, provocan la aparición de la temida y silenciosa araña de rincón, arácnido que suele encender las alarmas por su peligrosidad, especialmente ante una picadura. ¿La razón? El calor favorece su reproducción, por lo que se vuelven más activas.
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Generalmente, la araña de rincón suele pasar desapercibida en los hogares. En casas, se esconden en lugares oscuros y ocultos, por ejemplo, closets, o detrás de la ropa colgada en la pared, zapatos, rincones, etc., según precisa el Ministerio de Salud.
A esta araña —científicamente llamada Loxosceles laeta— hay que ponerle particular atención. Al morder a las personas, inyecta un veneno que puede causar loxoscelismo, cuadro clínico que, incluso, podría llevar hasta la muerte.
En esta nota, te contamos cómo son las arañas de rincón, los síntomas ante una de sus picaduras y qué hacer en este caso.
¿Cómo reconocer una araña de rincón?
De acuerdo con la Escuela de Medicina de la Universidad Católica, la araña de rincón mide entre 8 y 12 mm de largo, pero, con las patas extendidas, pueden llegar a los 45 mm.
Advierten que es de color pardo, siendo el cefalotórax más claro que el abdomen, con una mancha oscura en forma de violín, con la base dirigida hacia delante.
La entidad propone que, un método útil para reconocerla, es fijarse en el patrón de sus ojos. La mayoría de las arañas tienen ocho ojos en dos filas de cuatro, mientras que las arañas del rincón poseen seis ojos en tres pares, un par anterior y dos pares de ojos laterales, uno de cada lado.
En la "Guía para el Manejo de Mordedura de Araña de los Rincones" (2016) del Ministerio de Salud, señalan que esta araña es veloz y asustadiza, y que le gusta vivir detrás de los mueles, cuadros o libreros, entre otros.
Síntomas de picadura de araña de rincón: ¿cuáles son?
En la mencionada guía, el Minsal señala que la araña de rincón no es agresiva para el ser humano. Sin embargo, muerde si es que se siente atacada o al comprimirla contra la piel durante la noche cuando la persona duerme, o al vestirse con ropa colgada por largo tiempo en la muralla o en armarios.
En caso de picadura de araña de rincón, desde la Clínica Alemana, advierten que los síntomas a los que prestar atención son:
- Una sensación punzante
- Dolor
- Hinchazón
- Inflamación local
- Mancha roja en la zona
- Área violácea en el centro
La institución de salud explica que el veneno de la araña de rincón tiene una enzima que puede destruir ciertas proteínas de la piel y los glóbulos rojos, por lo que dentro de las primeras horas aparece una lesión cuyo centro es de color negro y la periferia de tono azulado.
Me mordió una araña de rincón: ¿qué hago?
Desde el Ministerio de Salud, señalan que, en caso de mordedura de araña de rincón, las medidas que se deben tomar son las siguientes:
- Lavado con agua y jabón de la herida y dejar en reposo el miembro afectado.
- Si la araña causante de la lesión está viva, se debe colectar y conservar en un recipiente con tapa con un algodón humedecido en agua.
- Si la araña causante de la lesión está muerta, se debe colocarla en un recipiente seco.
- Permanecer tranquilo e ir al Servicio de Urgencia más cercano.
La entidad señala que es importante no pisar o aplastar el animal, ya que esto dificulta su identificación. Agregan que, aunque el ejemplar no esté en buen estado, es fundamental llevarlo junto con la persona accidentada a urgencias, para así poder realizar la determinación de la especie de araña.
Araña de rincón: medidas preventivas para evitar riesgos
Existen diferentes medidas que podemos tomar para cuidarnos de las araña de rincón. Las principales son mantener normas de aseo e higiene en los hogares, especialmente en los rincones o detrás de los muebles.
Desde la Escuela de Medicina de la Universidad Católica recomiendan una prolija aspiración, además de eliminar las posibilidades de acceso y hábitat de los arácnidos, por ejemplo, cerrando orificios en muros, cielos y pisos.
Los principales consejos para evitar riesgos de arañas de rincón son:
- Separar las camas de los muros.
- No colgar ropas ni toallas en los muros.
- Revisar y sacudir la ropa y zapatos antes de ponérselos.
- Revisar la cama y rincones antes de acostarse.
- Evitar que los niños jueguen en el interior de closets o con cajas que no hayan sido previamente revisadas por un adulto responsable.
- Antes de realizar una mudanza, revisar y limpiar sus enseres.
- Usar «aracnicidas» adecuados y autorizados.
- Educar sobre estas materias a su grupo familiar y personas cercanas.
- Acudir rápidamente al centro de salud si sospecha haber sido mordido por una araña.
- Tratar de capturar el arácnido agresor para llevarlo al centro de salud e identificarlo.