La gestión de los plásticos de un solo uso ha sido un tema que ha tenido de cabeza a científicos y autoridades, sobre todo en el avance de investigaciones que permitan desarrollar alternativas a este material, sobre todo considerando que a nivel mundial, menos del 20% de los plásticos se recicla.
Pero, ¿cuál es la real dimensión del uso de plásticos en el planeta? Como dato, desde los años ‘60 hasta la actualidad, la producción y el consumo mundial de plástico se han multiplicado por más de 20 veces, y hoy en día, el 40% de la producción mundial de plásticos se destina a envases, siendo el 95% de ellos de un solo uso.
Ante este panorama, son muchísimos los desarrollos que han surgido para poder buscar una alternativa a los plásticos de un solo uso. Una de las más recientes buenas noticias respecto de este tema son los resultados que ha tenido la startup estadounidense Sway, que ha estado trabajando los últimos años en el desarrollo de prototipos que permitan reemplazar estos plásticos utilizando polímeros de algas, acaba de lanzar el primer sustituto escalable del mundo de los envases de un solo uso, con la capacidad de biodegradarse en menos de dos meses.
"Los océanos limpios, la abundante biodiversidad y las prósperas economías costeras están entrelazados con el éxito de Sway a medida que aceleramos la producción en 2024", declaró la cofundadora y directora ejecutiva de Sway, Julia Marsh en un comunicado de prensa. "Creemos que los materiales cotidianos deberían ayudar a reponer el planeta desde el mar hasta el suelo".
El retail se muestra optimista ante los desarrollos como los que propone Sway. "Estamos fascinados de ver el constante progreso de Sway hacia la producción a escala de mercado, que permitirá a empresas como la nuestra avanzar hacia la transición a materiales de próxima generación", afirmó Doug Forster, director de abastecimiento de la marca estadounidense de vestuario J. Crew.
Las alternativas basadas en algas marinas son mucho más comunes de lo que eran antes, y esto ha causado un explosivo crecimiento en su explotación y gestión. Según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, el cultivo de algas es el sector de más rápido crecimiento en la acuicultura estadounidense, y su producción internacional ha pasado de 34,7 mil toneladas en 1950 a más de 34,7 millones de toneladas al día de hoy.
Las algas también son de las alternativas más ecológicas al plástico, incluso más que los envases de papel o plásticos en base a maíz, cuyos tiempos de descomposición pueden ser más largos que los del insumo marino. Los datos indican que en la medida que más empresas se comprometen a llegar a metas de reducción de su impacto ambiental, desarrollos como los que Sway propone se perfilan como el futuro en temas de conservación del ecosistema y un avance importante hacia las metas de economía circular en el planeta.