Ya sean al desayuno o a la once, los panqueques son una receta que no puede faltar en la mesa cuando hay antojo de algo dulce. Y, para quienes desean excluir la harina de esta preparación, existen diversas variantes, como los panqueques con harina de almendras.
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La harina de almendra es, simplemente, almendra molida, y es especial para quienes tengan problemas con el gluten o para quienes sigan una dieta "keto". Existen versiones de harina de almendras con y sin piel, y puedes comprarla en diferentes tiendas o incluso hacerla en tu casa.
Si te complica usar el mencionado ingrediente, ¡no te preocupes! Recuerda que también tenemos una receta de panqueques con harina de avena en nuestra sección de recetas.
Dicho lo anterior, ahora sí prepárate, porque en esta nota te enseñaremos a hacer los mejores panqueques con harina de almendras. La receta es fácil y no requiere de muchos pasos. ¡Manos a la obra!
Receta fácil de panqueques con harina de almendras
Ingredientes para el panqueque de almendra
- 1 taza 1/2 de harina de almendras.
- 1 cucharadita de polvos de hornear.
- 1/4 de taza de leche (puede ser de almendras, vaca, o aquella de tu preferencia).
- 2 huevos grandes.
- 1 cucharadita de vainilla
- Miel, azúcar o endulcorante a gusto.
- Pizca de sal.
- Aceite para el sartén.
Paso 1
En un tazón, mezcla todos los ingredientes secos: la harina de almendras, los polvos de hornear y la pizca de sal. Si decidiste ponerle azúcar, intégrala en este paso también.
Paso 2
En otro tazón, bate los huevos hasta que estén bien mezclados y agrégales la leche. Si decidiste ponerles miel, intégrala en este paso.
Paso 3
Incorpora los ingredientes líquidos a los ingredientes secos y mezcla hasta que logres una masa homogénea. Recuerda que si el batido está muy espeso, puedes corregir la textura añadiéndole más leche.
Paso 4
Calienta un sartén antiadherente a fuego medio con un poco de aceite.
Paso 5
Vierte un poco de la masa en el sartén, según el tamaño de tu preferencia. Cocínalos durante unos 2-3 minutos por lado, o hasta que estén dorados y cocidos. ¡Listos para servir!
Recuerda que, opcionalmente, puedes decorarlos con lo que desees: manjar u otras salsas, como así también con frutas.