El mantenimiento de carreteras enfrenta desafíos cada vez más complejos debido al cambio climático y las condiciones extremas de frío y calor. Como respuesta, la industria de la construcción ha desarrollado tecnologías innovadoras como los rejuvenecedores de asfalto, que permiten la reutilización al 100% del pavimento envejecido, reduciendo el consumo energético y las emisiones de gases de efecto invernadero.
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Una segunda vida para el asfalto envejecido
El reciclaje de asfalto se ha posicionado como una solución clave para renovar las carreteras, extendiendo su vida útil y contribuyendo al cuidado del medio ambiente. Los aditivos especializados no solo restauran las propiedades originales del asfalto, sino que también fomentan un modelo de economía circular, minimizando la extracción de nuevos materiales y reduciendo los residuos.
“Al reciclar el asfalto, no solo estamos disminuyendo residuos, sino también reduciendo el consumo de energía y las emisiones de gases de efecto invernadero. Esto genera un impacto positivo en la economía circular, promoviendo el uso eficiente de los materiales y creando nuevas oportunidades de negocio”, comenta Allan Picoli, Gerente de Resinas y Aditivos para BASF Chile y Perú.
Beneficios de los polímeros en el asfalto
Los polímeros de estireno-butadieno son una alternativa clave para extender la vida útil del pavimento. Estos componentes optimizan la resistencia del asfalto en temperaturas extremas, previenen la oxidación y mejoran la retención de agregados, asegurando caminos más seguros y duraderos durante más de 25 años.
En Europa y América del Norte, ya se están utilizando altos porcentajes de asfalto reciclado (RAP), con una media del 80% en capas inferiores e intermedias, y una proyección del 100% en el futuro cercano. Chile, con su extensa red de carreteras y un mercado dinámico de concesiones, se presenta como el escenario ideal para implementar estas tecnologías innovadoras y reducir los costos y tiempos de mantenimiento.
Rheofalt: Aditivo eficiente y sostenible
Uno de los avances más destacados es Rheofalt, un aditivo elaborado con materias primas renovables y sin solventes, que reduce el uso de energía en la modificación del asfalto y mejora su rendimiento. Este aditivo optimiza la penetración y resistencia de las mezclas asfálticas, garantizando un tratamiento a largo plazo sin efectos negativos sobre las obras.
“Con Rheofalt, no solo mejoramos la eficiencia energética, sino que también establecemos un nuevo estándar para la sostenibilidad en la construcción de carreteras”, destaca Picoli.
Un futuro más sostenible para las carreteras chilenas
La implementación de estas tecnologías avanzadas permitirá a Chile liderar en la renovación de pavimentos envejecidos y establecer nuevas prácticas sostenibles en la industria del asfalto. Con esta visión, el país tiene la oportunidad de adoptar soluciones duraderas y eficientes, mejorando la seguridad vial, la fluidez del tráfico y disminuyendo el impacto ambiental.