La diabetes es una enfermedad crónica que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), fue la causa directa de 1,5 millones de defunciones en 2019, de las cuales un 48% ocurrió antes de los 70 años de edad.
A nivel regional, las cifras son igualmente preocupantes: la Organización Panamericana de la Salud (OPS), por su lado, asegura que cerca de 62 millones de personas en América tienen diabetes, cifra que se elevaría a 422 millones en todo el mundo.
Si bien se suele escuchar mucho sobre esta enfermedad, ¿en qué consiste exactamente?
La OMS detalla que la diabetes mellitus es una enfermedad crónica que aparece cuando el páncreas no secreta suficiente insulina o cuando el organismo no utiliza eficazmente la insulina que produce. La insulina es una hormona que regula la concentración de glucosa en la sangre, es decir, la glucemia.
Prediabetes
Un estilo de vida poco saludable puede generar una alza de glucosa en la sangre, lo que en un alto nivel provoca la diabetes. Sin embargo, en ese proceso se encuentra el estado de prediabetes, que es reversible.
Según destaca Mayo Clinic, tener prediabetes significa que tienes un nivel de glucosa sanguínea más alto de lo normal. Aún no es lo suficientemente alto como para considerarse diabetes tipo 2, pero si no hacen cambios en el estilo de vida, los adultos y niños con prediabetes son más propensos a desarrollar diabetes tipo 2".
"Si tienes prediabetes, es posible que ya esté comenzando el daño a largo plazo de la diabetes (especialmente, en el corazón, los vasos sanguíneos y los riñones)”, complementaron.
Síntomas
Los síntomas de una prediabetes suelen ser los siguientes:
- Aumento de sed
- Micción frecuente
- Aumento de hambre
- Fatiga
- Visión borrosa
- Entumecimiento u hormigueo en manos o pies
- Infecciones frecuentes
- Heridas que tardan en cicatrizar
- Pérdida de peso involuntaria
Estado reversible
Pero aquella progresión se puede evitar con cambios en el estilo de vida. Por ejemplo, puntualiza Mayo Clinic, "comer alimentos saludables, hacer actividad física como parte de tu rutina diaria y mantener un peso saludable puede ayudar a que el nivel de glucosa sanguínea vuelva a la normalidad".
"Los mismos cambios en el estilo de vida que pueden ayudar a prevenir la diabetes tipo 2 en adultos también pueden ayudar a que los niveles de glucosa sanguínea en niños vuelvan a la normalidad”, agregan desde la clínica.