Tomando su orina y durmiendo la mayor parte del tiempo fue como sobrevivió Rosa Mejías, mujer que fue encontrada al interior de un pozo de casi 12 metros de profundidad tras permanecer 7 días desaparecida en la comuna de Alto Hospicio, región de Tarapacá.
Así lo informó Marcos Opazo, superintedente de Cuerpo de Bomberos de Alto Hospicio, en conversación con Las Últimas Noticias, detallando además que "lo que le favoreció fue que en el fondo del pozo había basura e incluso ropa, lo que debe haber amortiguado la caída".
Todo se remonta a la tarde de este domingo 29 de septiembre, cuando cerca de las 19:45 horas el personal de emergencias recibió una llamada de que una mujer solicitaba auxilio desde un pique ubicado en un sector minero de la comuna de Alto Hospicio.
Los antecedentes expuestos por la Fiscalía, en base al testimonio de la víctima y de testigos, establecen que ella desapareció el pasado 22 de septiembre, en circunstancias en que salió desde su trabajo ―era guardia de seguridad de un sitio eriazo― para ir a comprar almuerzo para su pareja.
"Creemos que sobrevivió por el amor a su hija. Dijo que tenía lagunas, que pasó mucho rato durmiendo, que luego empezó a rascar la tierra y pudo escalar. Que cuando tenía sed se tomaba su orina y así sobrevivió los siete días. Pero es raro, porque las noches son muy heladas", sostuvo Marcos Opazo.
Sin embargo, y como consecuencia de las extermas condiciones en las que permanecía, Rosa fue encontrada deshidratada, con pérdida de conciencia y algunos golpes tras los 7 días que estuvo desaparecida.
La mujer, por su parte, únicamente recuerda haber llegado en un auto hasta el pozo, sin tener mayores indicios de los responsables y las circunstancias en que es presuntamente secuestrada. Si bien se barajan diversas hipótesis detrás de este hecho, la familia apunta a la pareja de la víctima como el principal sospechoso.
"Puede estar siendo presionada o amenazada".
En conversación con el medio antes mencionado, Cristian Mejías, hermano de la afectada, sostiene que ella "puede estar siendo presionada o amenazada".
El hombre recién supo que su hermana estaba desaparecida el lunes 23 de septiembre, cuando fue avisado por un familiar de la pareja de Rosa.
"Ellos nos dijeron que no sabían dónde estaba, pero que se había llevado unas tarjetas, plata, joyas y daban a entender que mi hermana se había ido hacia el sur. Todo fue muy raro, al tercer día su pareja, quien también trabaja como guardia en la misma empresa, empezó a publicar por Facebook que mi hermana había aparecido y que no había que preocuparse", relató Cristian Mejías.
"Nosotros vimos esas publicaciones, pero ella no aparecía. Nos desesperamos y conseguimos una entrevista con la fiscal. Gracias a ello se hicieron allanamientos y se requisaron celulares", agregó.
Según el familiar de la mujer, "desde que comenzó a pololear con el muchacho, hace 8 años atrás, ella empezó a cambiar y a alejarse. Nos evadía. Pero el domingo nos abrazamos, ella nos reconoció. Nos dijo que había llegado ahí en un vehículo pero no se acordaba de nada (...) Si bien ella negó ser víctima de violencia, creemos que puede estar siendo presionada o amenazada".
En tanto, la fiscal de Alto Hospicio, Jocelyn Pacheco, afirmó que "todavía no podemos aseverar que existió intervención de terceros ni tampoco descartar lo mismo...Al parecer ella habría estado ahí todo el tiempo que estuvo desaparecida. Todavía no podemos revelar los detalles de su declaración (...) Actualmente, la pareja está en calidad de testigo".