Un niño de 6 años de la localidad rural de Panimávida, en la comuna de Colbún, habría sido obligado por un conductor de microbús a descender del vehículo porque su recorrido "había terminado". El pequeño, que estaba lejos de su casa, debió caminar más de un kilómetro para llegar a su destino, exponiéndose a una serie de peligros.
"Lo puso en riesgo de todas las formas. Mi hijo no puede dormir tranquilo, tiene pesadillas, no quiere ir a la escuela", comentó Sandy Carillo, su madre.
A pesar de la equivocación, los apoderados del establecimiento no excusaron al responsable de dejar al niño solo en un lugar desconocido: "Debió haber pensado que si iba con un niño que no era de ahí, pudo haberse devuelto al colegio o haber llamado a las autoridades o Carabineros para avisar".
"Fue una negligencia, fue un abandono de menores. Yo tengo una querella interpuesta por abandono de menor", concluyó la madre afectada.