El Gobierno de Brasil llamó a consultas a su embajador en Tel Aviv y convocó al embajador israelí, Daniel Zonshine, después de que Israel declaró este lunes al presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, persona "non grata".
La decisión se tomó luego que el mandatario equiparara la ofensiva israelí contra Gaza con el Holocausto.
“Lo que está ocurriendo en la Franja de Gaza con el pueblo palestino no tiene paralelo en otros momentos históricos. De hecho, sucedió cuando Hitler decidió matar a los judíos”, dijo Lula.
El canciller brasileño, Mauro Vieira, convocó al embajador israelí para que comparezca este lunes al palacio Itamaraty de Río de Janeiro, donde se encuentra para la reunión de ministros de Exteriores del G20 de los próximos miércoles y jueves, según informó la Cancillería del país suramericano.
Igualmente, llamó a consultas al embajador brasileño en Tel Aviv, Frederico Meyer, que regresará el martes a su país, después de haber sido convocado este mismo lunes por el Gobierno israelí para trasladarle la dura respuesta del Gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu a las palabras de Lula.
Meyer fue citado por el ministro de Exteriores de ese país, Israel Katz, en un lugar cargado de simbolismo como el Museo del Holocausto de Jerusalén, en lugar de la sede de la Cancillería, como es habitual en estos casos, lo cual generó un "enorme malestar" en la diplomacia brasileña, según dijeron a EFE fuentes oficiales.