¿Qué tan importante es tu teléfono para tí? Si se perdiera, ¿hasta donde irías para encontrarlo? Para Ezequiel, un trabajador argentino de Mar del Plata, su celular fue lo suficientemente importante como para meterse a un pozo de 18 metros voluntariamente.
Horas después, bomberos debieron rescatarlo. El hecho tomó lugar a pasos de la Escuela Nueva Pompeya, donde la víctima había perdido su dispositivo móvil al realizar tareas de mantenimiento.
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Poco después de que Ezequiel encontrara su teléfono, voluntarios acudieron al colegio.
La institución los había contactado para socorrer a un hombre atrapado. Según cuentan las autoridades, al recibir el llamado, estos pensaron que se trataba de una caída accidental.
La historia del teléfono caído
Según informó el medio 0223, Ezequiel habría llegado al fondo de este agujero con una soga, pero al regresar, se dió cuenta que esta le había quedado corta.
“Ayer se me había caído y hoy lo fui a buscar, porque tengo todo lo que me manejo con el trabajo, cuentas, tengo todo ahí. Nosotros hacemos mantenimiento de los techos”, contó el hombre al medio marplatense.
Afortunadamente para Ezequiel, la situación no pasó a peores. La rápida llegada de bomberos transformó una posible tragedia en una divertida anécdota.
En tanto, el celular tuvo daños menores relacionados a la caída y funciona sin inconvenientes.