A partir de las 16:00 horas se enfrentan el Barcelona con el Bayern Múnich por la Champions League, duelo que promete ser uno de los más atractivos de la jornada.
Tras un arranque de temporada esperanzador, en el que el Barça marcha líder de LaLiga EA Sports y ha ganado 10 de los 12 duelos que ha disputado entre todas las competiciones, el cuadro catalán afronta una semana decisiva para medir la talla del equipo en las grandes citas, con el doble enfrentamiento ante el cuadro bávaro y contra el Real Madrid el próximo sábado.
Sobre el papel, no existe un rival más adverso que el Bayern. El balance de los azulgranas contra el conjunto germano es de dos triunfos, dos empates y once derrotas en quince partidos, pero los cinco duelos más recientes se han saldado con un pleno de derrotas y un marcador acumulado de 2 a 19 desfavorable al bando barcelonista, que no gana a su próximo adversario desde 2015.
De entre todas ellas, ninguna fue tan dolorosa como el 2-8 en los cuartos de final de la 'Champions 2019-20', cuando Flick dirigía al coloso muniqués. Cuatro años y medio después, el preparador alemán abandera el rejuvenecido proyecto del Barcelona, que solo mantiene en nómina a dos supervivientes del naufragio de Lisboa, el lesionado Marc-André Ter Stegen y el centrocampista Frenkie de Jong.
En apenas un semestre, Flick ha impuesto en Barcelona el sello que definió a su Bayern: un equipo que defiende en campo rival, muerde para robar el balón y busca la portería durante los 90 minutos con un juego vertical en el que Robert Lewandowski, autor de 14 goles en 12 partidos oficiales, es la punta de lanza.
Enfrente, los de Hansi Flick se encontrarán al equipo que lanzó al estrellato al técnico germano. Precisamente, tras su salida para hacerse cargo de Alemania en 2021, comenzó un lento declive del Bayern que tuvo su punto culminante el pasado curso, cuando, al mando de Thomas Tuchel, finalizó su primera temporada sin títulos en 12 años.
Ello obligó al club bávaro a emprender una reconstrucción de la plantilla que se quedó a medias por los altos salarios de algunas piezas de los que la entidad deseaba desprenderse, pero cuyo inicio de temporada augura buenas vibraciones -marcha líder en la Bundesliga empatado a puntos con el Leipzig-.
La cara visible de la nueva era es el nuevo técnico, Vincent Kompany, recomendado por Guardiola a la dirigencia de Säbener Strasse, el cual está tratando de implantar en el equipo los principios futbolístico que adquirió en sus años de corto en Manchester con el exentrenador del Barça y el Bayern.
Con una defensa adelantadísima, la cual le ha pasado alguna vez factura en choques contra delanteras rivales veloces -véase el Eintracht-, el combinado del belga trata de encerrar a sus rivales en campo contrario para luego someterlo a través de la circulación rápida de balón.
Entonces entra en juego el vertiginoso desborde de hombres como Musiala, Gnabry, Sané o el recién llegado Olise, que acaba por rematar el furtivo Harry Kane. Una fórmula muy parecida a la instalada por Flick en Barcelona.
Los bávaros llegan, eso sí, con la duda de Musiala, baja en los últimos dos encuentros Bundesliga y ausente en el parón internacional por unas molestias en la cadera. El mediapunta comenzó a ejercitarse por su cuenta a la vuelta de la interrupción internacional y este lunes ya participó en el entrenamiento grupal.
Necesitado de una victoria en la máxima competición continental tras el varapalo sufrido en Birmingham ante el Aston Villa, se espera que Kompany lo fuerce para intentar asaltar, como en las últimas dos ocasiones -ambas en el Camp Nou, eso sí-, el feudo azulgrana.
Barcelona vs. Bayern Múnich: Sigue ONLINE el partido de la Champions League