La tecnología y la inteligencia artificial han llegado para quedarse, y ahora están revolucionando el sector de la construcción con los llamados edificios inteligentes. Estas soluciones tecnológicas avanzadas no solo ofrecen mayor seguridad, sostenibilidad y ahorro de costos, sino que también mejoran la calidad de vida de sus usuarios y la eficiencia de las empresas constructoras.
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Inteligencia artificial en la edificación
En estas construcciones de vanguardia, una variedad de aplicaciones tecnológicas trabajan en conjunto para ofrecer un entorno seguro y libre de estrés. Desde sistemas de detección de incendios, protección perimetral y notificación de emergencias, hasta el control de accesos y guiado inteligente de estacionamiento, la inteligencia artificial lo abarca todo, garantizando que residentes y trabajadores estén protegidos en todo momento.
Camilo Rogeles, Regional Channel Manager de Hikvision, comenta que aunque estos edificios llevan varios años en el mercado, han evolucionado considerablemente. “Hoy en día, la tecnología juega un rol más preventivo que reactivo, proporcionando una experiencia mejorada y segura para todos”, señala.
Seguridad como pilar clave de los edificios inteligentes
La seguridad es una de las mayores preocupaciones para las personas al elegir un lugar para vivir o trabajar. Los edificios inteligentes responden a esta necesidad con cámaras de seguridad impulsadas por IA que operan las 24 horas, eliminando falsas alarmas y asegurando la captura de vídeos en alta definición. Además, en situaciones de emergencia, estos sistemas son capaces de abrir automáticamente las puertas, evitando que las personas queden atrapadas.
Otra innovación destacada es el uso de reconocimiento facial para los ingresos, lo que aumenta la seguridad y rapidez en comparación con los sistemas tradicionales como las huellas dactilares. “La lectura facial es casi instantánea y muy difícil de vulnerar”, explica Rogeles.
Construcciones que buscan cuidar el planeta
Sostenibilidad y eficiencia energética son otros pilares de los edificios inteligentes. Por ejemplo, en edificios corporativos, el sistema de guiado para estacionamiento reduce el tiempo y las emisiones de gases contaminantes al ayudar a los conductores a encontrar un lugar disponible rápidamente. Además, los sistemas de control de ascensores y salas de reuniones optimizan el consumo de energía al alargar la vida útil de los equipos y apagar automáticamente los servicios en espacios no utilizados.
La integración de estas tecnologías en una plataforma de gestión centralizada no solo facilita la operación de los edificios, sino que también permite a las empresas inmobiliarias ofrecer servicios de alta calidad con menores costos operativos, manteniendo siempre los más altos estándares de protección de datos personales.
“La tecnología ya no es un lujo, es una necesidad para quienes buscan un entorno seguro y protegido”, concluye Rogeles.
