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Ciencia

Nueva plataforma submarina Lander del INACH permitirá el monitoreo ambiental en tiempo real en la península Antártica

El INACH lanza la plataforma submarina Lander para monitoreo ambiental en la Antártica, mejorando la recolección de datos oceanográficos en tiempo real.

Plataforma submarina Lander del INACH instalada en la península Antártica para monitoreo ambiental en tiempo real. Chile, 2024.

Vicente Barraza

- TVN

Martes 30 de julio de 2024

La implementación de nuevas tecnologías autónomas para el registro continuo de datos oceanográficos es esencial en el monitoreo integral del océano Austral, especialmente ante la crisis climática actual. La adquisición de datos de alta resolución es crucial para estimar el impacto de los cambios en los procesos ecosistémicos relacionados con el secuestro de carbono, la acidificación del océano y la incidencia de olas de calor, ante el panorama aparece la nueva plataforma submarina Lander.

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Desafíos y soluciones del panorama antártico actual

El despliegue de buques de investigación es necesario, pero sus costos económicos y la dependencia de condiciones meteorológicas favorables limitan su operatividad, especialmente en invierno. Estas restricciones dejan vacíos significativos en la información sobre la dinámica y variabilidad ambiental oceanográfica durante este período.

Para abordar estas brechas, el Instituto Antártico Chileno (INACH) presentó la propuesta de una plataforma submarina multiparamétrica (Lander) en el V Concurso de Equipamiento Científico y Tecnológico Mayor FONDEQUIP de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID). De 33 proyectos presentados a nivel nacional, solo cinco fueron adjudicados, incluyendo la plataforma Lander del INACH, con una inversión superior a los $900 millones de pesos, proyectándose su operatividad para la temporada 2025-2026.

Características del proyecto Lander

Esta plataforma contará con modernos equipos oceanográficos, instalados a 30 metros de profundidad, equipados con sensores de temperatura, salinidad, oxígeno disuelto, fluorescencia, clorofila, materia orgánica disuelta, turbidez, presión parcial de CO2, correntómetro ADCP, hidrófonos y un recolector robótico de ADN ambiental. Estará ubicada en la bahía Chile (isla Greenwich, archipiélago Shetland del Sur) y permitirá la transmisión en tiempo real de la mayoría de las variables. Además, se instalará una segunda plataforma en la bahía Sur (isla Doumer), cerca de la base Yelcho del INACH, para fines comparativos.

Impacto y beneficios

Estas plataformas generarán datos valiosos para monitorear procesos ecosistémicos, desde la variabilidad oceanográfica de masas de agua hasta la influencia del derretimiento glaciar y el acoplamiento océano-atmósfera. También permitirán detectar organismos desde bacterias hasta grandes cetáceos y caracterizar la contaminación acústica.

Francisco Santa Cruz, investigador del Departamento Científico del INACH y coordinador del proyecto, explica: “Chile ha realizado importantes esfuerzos para instalar este tipo de instrumentación en la península Antártica, aunque siempre con equipos más sencillos. Esta será la primera plataforma chilena con tecnología de punta capaz de adquirir y enviar datos en tiempo real, modernizando y automatizando el monitoreo integral del océano Austral.”

Colaboración Institucional

Andrés López, subdirector técnico del INACH, destaca que el proyecto ha atraído el interés de diversas instituciones, formando una propuesta robusta y adjudicada como la única de la macrozona austral beneficiada en esta convocatoria.

“Este es el tercer equipo adjudicado por el INACH en los concursos de equipamiento, luego de un glider y un microtomógrafo de rayos X,” añade López.

El INACH se ha asociado con instituciones que han fortalecido el monitoreo oceanográfico de Chile en la Antártica, incluyendo el Centro de Investigación Dinámica de Ecosistemas Marinos de Altas Latitudes (IDEAL) de la Universidad Austral de Chile, la Facultad de Ciencias Biológicas de la Pontificia Universidad Católica de Chile, el Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas (CEAZA), el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de Chile (SHOA) y el Centro Asistencial Docente e Investigación (CADI) de la Universidad de Magallanes.

“Queremos continuar el excelente trabajo de estas instituciones, colaborar y llevar el monitoreo ambiental a un nivel superior,” expresa Santa Cruz.

El INACH, como organismo técnico del Ministerio de Relaciones Exteriores, cumple con la Política Antártica Nacional incentivando la investigación de excelencia y participando en el Sistema del Tratado Antártico y foros relacionados. Además, fortalece a Magallanes como puerta de entrada al Continente Blanco y realiza acciones de divulgación del conocimiento antártico a la ciudadanía.