A dos días de que comience el juicio de apelación por el caso Narumi, el padre de Nicolás Zepeda, el chileno condenado a 28 años de cárcel en Francia por la muerte de la joven japonesa, habló en exclusiva con 24 Horas. Cuestionó la falta de pruebas de la Fiscalía, la ausencia del cuerpo del delito y adelanta un dato con el que creen podrían revertir la pena a su hijo.
A continuación revisa la entrevista que realizó la corresponsal Flavia Cordella a Humberto Zepeda:
Quedan horas para que comience la audiencia de apelación, ¿cómo se están preparando para esa instancia y cuáles son las expectativas que tienen?
Nosotros seguimos reuniendo mucha información, más que todo, en ciertos detalles claves en este caso. Respecto a las expectativas son muy altas porque se le dará a Nicolas nuevamente la oportunidad de demostrar su inocencia.
¿Por qué se tomó la decisión de apelar a la sentencia?
Porque seguimos muy convencidos de que se está culpando a la persona equivocada en este lamentable caso. Nicolás es absolutamente inocente de lo que se le culpa.
Él no ha cambiado una letra respecto a lo que viene diciendo desde hace 6 años. Y la persona realmente responsable de este hecho está libre caminando por alguna calle en Francia o en otro lugar. Existen muchos detalles del caso que la opinión pública desconoce. Recordemos que lamentablemente no existe ninguna prueba o evidencia científica que asegure la existencia de una persona que haya perdido la vida.
No sabemos con exactitud ni existen pruebas concretas de cómo, cuándo ni donde desapareció o perdió la vida Narumi. No existen testigos presenciales del hecho. No existen imágenes ni grabaciones de las cámaras de videovigilancia que capten el hecho, aún existiendo 29 cámaras en todo el campus. Según la prensa de la época, existe una imágen de una cámara de la residencia universitaria que capto a Nicoláó saliendo solo y con su maleta de equipaje del edificio en la madrugada de ese día. ¿Qué pasó? Lo que grabó la cámara desapareció y ésta fue retirada del edificio.
Tampoco se encontró ningún arma homicida, ni se encontraron huellas de ADN de Narumi en el vehículo que utilizaba Nicolás para movilizarse esos días. Ni en el portamaletas ni en los asientos traseros.
Se buscó por muchos días en el bosque, lugar donde se supone la llevaron, con muchos recursos aéreos, por tierra, personal de búsqueda y perros expertos en encontrar cuerpos de personas y también en el rio Doubs y no se encontró absolutamente nada.
Los policías al inicio de la investigación dijeron que se trataba de un secuestro, pero luego se desistieron y hablaron de una muerte. Que la había sacado en una maleta, pero luego señalaron que había sido en una manta. Que fue trasladada al bosque en el vehículo de Nicolás, pero no se encontraron rastros de ADN de ella, ni en el portamaletas ni en los asientos traseros del vehículo. Que había sido enterrada en un bosque, no se encontró ningún cuerpo. Que la trasladaron en una maleta, que nunca se encontró y que no se encontraron huellas de haber sido quemada en el bosque o encontrada en alguna ribera del río. Se revisaron toneladas de basura y no se encontró nada.
Dado que ninguna de las anteriores hipótesis fuera comprobada, se dice que fue lanzada al río Doubs, pero nunca se encontró ningún rastro del cuerpo o ropa de ella flotando en el río, en alguna ribera o desembocadura del sector.
Para un caso tan importante, no se hizo ninguna reconstitución de escena, para ver los tiempos y los recorridos que pudo haber hecho una persona, confirmar los gritos y sus distancias, sino que todo fue desde la oficina de un policía. Al menos en 4 ocasiones, ingresaron personas al dormitorio de Narumi antes que ingresaran los investigadores, incluido el novio francés.
La policía encontró unos documentos arriba del velador que no había encontrado en la primera ocasión que entraron. Es decir, el sitio del suceso estaba absolutamente contaminado, habían sido arregladas muchas cosas.
La interrogante es, cómo salió una persona de un edificio, de contexto delgado, con dos maletas y un cuerpo inerte en sus hombros, por una puerta que se abre sólo por dentro y automáticamente se cierra al salir. Es realmente una incógnita, sin ser visto por ninguna de las 29 cámaras de videovigilancia del lugar ni tampoco por los guardias nocturnos del campus que hacían rondas por el lugar.
¿Cómo ha sido este tiempo en el que su hijo ha estado privado de libertad? Para él y para su familia.
Muy tristes pero también de mucha esperanza y fe. Han sido 6 años muy duros en todo aspecto. Hemos sufrido mucho con esta injusticia que esperamos sea revocada en esta nueva oportunidad.
Esta situación claramente es un antes y un después en nuestra familia. Afortunadamente hemos recibido muchos apoyos de profesores, amigos, amigas, familiares y personas que conocen a Nicolás desde pequeño y que no creen en el personaje que crearon para acusar a un culpable de estos lamentables hechos.
¿Cómo ha sido la estancia de Nicolas en el Centro de Detención en Francia desde un comienzo?
Es muy triste confirmar que nuestro hijo sufrió en su estadía en el centro de detención de Besancon -semanas antes de su primer juicio y en un claro intento de amedrentamiento ante sus declaraciones- una agresión psicológica y física por un guardia de ese lugar.
Frases como “que tuviera mucho cuidado con lo que iba a declarar”, que iba a “perder tiempo porque ya estaba declarado culpable”, “yo sólo recibo órdenes” y otras frases intimidatorias, fueron la introducción a una agresión física de golpes de mano recibidos por Nicolás. Prueba de lo anterior es que el guardia fue separado de sus funciones y posteriormente Nicolás fue trasladado a otro centro de detención.
Esta situación fue denunciada en su oportunidad a nuestro consulado en París y también en nuestra cancillería en Santiago.
Contando con el exámen médico emitido por un hospital francés que prueba la agresión física recibida, no se gestionó ninguna queja ante el gobierno Frances por este hecho.
¿Han podido estar en contacto permanente con él?
Sí, tenemos algunos contactos y le podemos también enviar cartas de sus familiares y amigos. Habitualmente sabemos cómo se encuentra.
¿En qué cambiará la estrategia de los abogados en este nuevo proceso?
Eso, lamentablemente, no lo podemos compartir, pero claramente debiera ser distinta al primer juicio.
Algunos plantean que una posibilidad es que Nicolás se declare culpable y con ello logre una reducción de la pena.
Cuando una persona es inocente, pero es juzgada en otro país, con otro idioma, otras leyes y otras costumbres es muy difícil todo. Es muy cuesta arriba pero en nosotros siempre existirán fuerzas para luchar y lograr comprobar la inocencia de nuestro hijo. Apostamos por la verdad y la justicia.
Cuando comenzó el proceso usted dijo que tenía plena confianza en la justicia francesa, para esta nueva etapa, ¿siguen teniendo la misma confianza?
En el primer proceso tenía plena confianza en la justicia francesa, pero durante el desarrollo del juicio, muchas personas asistentes se acercaron a decirme que Nicolás fue declarado culpable antes de que comenzaran los debates. Estaba sentenciado desde antes que llegara su juicio.
Para este segundo proceso sigue la confianza plena, porque serán otras personas las que escucharán a Nicolás, en otra ciudad y en otras condiciones esperamos un poco mejor.
También aseguró que se trató de convencer a la opinión pública con opiniones infundadas, ¿por qué cree que se dio esa situación?
Porque se instaló la idea de que en este caso, el monopolio del dolor sólo lo tenía una familia y la otra no. No saben del sufrimiento de toda nuestra familia y los problemas de salud graves que hemos sufrido por este caso. Decían que una familia contaba con más recursos económicos que la otra, entonces la opinión pública tomaba preferencias por la “supuesta” familia más débil y se reforzaba esa idea en televisión. Afortunadamente esa afirmación fue aclarada y no es así. Es una realidad muy distinta a lo que decían.
¿Cómo era la relación que tenían y por qué cree que este fue el desenlace de la historia?
Narumi y Nicolás tenían una relación muy linda sentimentalmente, dos jóvenes que aunque venían de culturas muy distintas, lograron sacar adelante su relación. Luego la distancia y el tiempo transcurrido separados, hizo que se separaran en buenos términos y de forma consensuada entre ambos.
¿Insisten en la inocencia de Nicolás?
Absolutamente, porque lo conocemos desde siempre, porque sabemos de sus valores y principios y que sería incapaz de cometer los hechos de los cuales se le acusa. Es una persona que siempre está muy preocupada de los demás, de la gente de mayor edad, deportista y muy colaborativo con las personas más vulnerables de nuestro país. Por muchos años participó, por ejemplo, en actividades para un “Techo para Chile” como voluntario y realizó asesorías de su profesión gratuitas a emprendedores de bajos recursos
¿Existen nuevos testimonios o información que puedan dar un vuelco en el caso?
Existen pero se harán público en los próximos días. En su canal vi una declaración de un testigo que dice haber visto viva a Narumi, días después de su desaparición. También está la estadía de ella en un restaurant de la localidad de Verdún. Hago un llamado a más personas valientes y decididas que hayan visto a Narumi, a que puedan ayudar con sus testimonios a esclarecer el cómo, donde y cuando desapareció.
