La actriz Paulina Urrutia realizó su primera aparición pública tras pasar años particularmente complejos y lo hizo dictando un taller titulado "La ciencia de las emociones", en el marco del Festival Puerto de Ideas Antofagasta.
En mayo de 2024 –casi 12 meses después de la muerte de su esposo, el periodista Augusto Góngora–, la ahora coach motivacional fue diagnosticada con cáncer de mama triple negativo, enfermedad que reveló en octubre del mismo año, en una entrevista con Claudia Conserva.
Fue mientras abordaba el fallecimiento de su esposo que Urrutia se refirió a su diagnóstico y la forma en que la sociedad aborda la afección.
"Lo más doloroso ha sido cuando la gente me dice 'es que usted ha sufrido tanto que tenía que darle cáncer', como si el sufrimiento fuera algo que hay que pagar con enfermedad", puntualizó, segúnThe Clinic, para luego agregar que si así funcionaran las enfermedades, todos deberíamos estar con cáncer.
"Todos sufrimos. Hay que dejar de exigir que las personas 'sanen' para ser aceptadas. Sanar no siempre es posible, y morir también es parte de la vida", expresó.
En conversación con el medio citado, la querida intérprete señaló que "la gente, en general, no tiene conciencia de cómo influyen las emociones en la vida cotidiana" y que por ello "no las consideran".
"Las emociones hacen lo que quieren con uno. Si no sabemos cómo nos afectan, tampoco sabemos cómo aprender. Y todo aprendizaje verdadero, el que queda para siempre, es emocional", agregó.
Finalmente, señaló que en la actualidad su vida se mueve "por el anhelo" y "la fuerza del amor". "Es el estado que nos impulsa a seguir viviendo. El amor como motor, como impulso, como energía, no es algo romántico, es lo que nos hace levantarnos todos los días. Y aquí seguimos, dándole como mono porfiado", zanjó.
