Este 31 de mayo en el mundo se celebra del Día sin Tabaco, una fecha que busca generar conciencia respecto a los riesgos de este hábito y reducir su consumo.
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El doctor Felipe Erpel, broncopulmonar de la Clínica Bupa Santiago, resaltó la conexión del consumo de tabaco con diversos tipos de cáncer y patologías cardiacas.
“El daño que provoca el humo del tabaco es muy amplio. Es el responsable de las principales enfermedades respiratorias crónicas, como EPOC, tos obstructiva, y aumenta la incidencia de infecciones pulmonares. Asimismo, es la causa principal de cáncer de pulmón”, indica el experto.
El humo del tabaco daña las paredes de los vasos sanguíneos, fomenta la formación de coágulos y reduce el flujo sanguíneo.
Datos de la última Encuesta Nacional de Salud revelan que el 40,6% de la población adulta en Chile fuma habitualmente y alrededor de 45 personas mueren al día por causas asociadas al consumo de tabaco.
El especialista, además explica que el tabaquismo ha sido relacionado con la aparición de distintos tipos de cáncer: de lengua y garganta, mejillas y encías; de esófago, de riñón y cáncer de vejiga, ya que las sustancias químicas presentes en el humo son absorbidas por los pulmones y luego excretadas por la orina.
Beneficios de dejar el tabaco
Abandonar el tabaco ha resultado ser una decisión efectiva para prevenir estos problemas de salud y mejorar la calidad de vida.
En ese sentido, expertos detallan los beneficios que tiene dejar el tabaco:
- Si se deja antes de los 50 años, disminuye a la mitad el riesgo de muerte en los próximos 15 años.
- Al año de dejar el cigarro, el riesgo de morir por enfermedad coronaria baja a la mitad.
- A los 10 años de abandonarlo, el riesgo de cáncer pulmonar baja de un 30% a 50%.
- Evitar el tabaco baja el riesgo de cáncer de laringe, esófago, páncreas y vejiga.
- Asimismo, disminuye la posibilidad de presentar enfermedad pulmonar obstructiva crónica, neumonía, úlcera gástrica y duodenal.
La decisión de evitar el tabaco también reduce el riesgo de cáncer de laringe, esófago, páncreas y vejiga, así como la posibilidad de presentar enfermedad pulmonar obstructiva crónica, neumonía y úlceras gástricas y duodenales.
Además, protege a quienes están a nuestro alrededor, especialmente a los niños, que pueden sufrir efectos perjudiciales por la exposición al humo de segunda mano.
“Dejar de fumar es la medida más efectiva para prevenir estos problemas de salud y mejorar la calidad de vida. Si una persona está interesada en dejar de fumar, yo recomiendo buscar apoyo médico y utilizar los recursos disponibles para ayudarlo en el proceso de abandono del tabaco”, añade el broncopulmonar de Clínica Bupa Santiago.