El consorcio automovilístico Volkswagen planea cerrar al menos tres de las diez plantas que tiene en Alemania, lo que contemplará el despido de miles de trabajadores. Además, otra medida que implementarán será la reducción del tamaño del resto de las fábricas.
El anuncio fue realizado por la presidenta del comité de empresa, Daniela Cavallo, quien se dirigió a los funcionarios de Volkswagen para entregar detalles sobre esta situación.
"El consejo directivo planea cerrar al menos tres fábricas de Volkswagen", sostuvo Cavallo, quien agregó que "todas las fábricas de Alemania están en peligro. Nadie entre nosotros puede sentirse seguro".
Cabe consignar que la automovilística cuenta con cerca de 120.000 trabajadores en Alemania, y aproximadamente la mitad de ellos se desempeñan en la fábrica central de Wolfsburgo.
Específicamente, el consorcio automovilístico posee nueve plantas más: Emden, Osnabrück, Hannover, Zwickau, Dresde, Kassel, Salzgitter, Braunschweig y Chemnitz.
VW continuará negociaciones con los sindicatos
En este contexto, Volkswagen retomará con los sindicatos la segunda ronda de negociaciones, que iniciaron en septiembre. Este segundo encuentro se llevará a cabo este miércoles. Estos diálogos se generan en un momento convulso para la mayor compañía automovilística europea, que tiene como objetivo endurecer su programa de ahorro.
Desde los sindicatos solicitan un aumento del 7% salarial y amenazaron con huelgas, las que se podrían desarrollar en diciembre de este año, si no se toman en consideración sus demandas. Por su parte, desde la automovilística insisten en la necesidad de reducir costes laborales.
La dirección avisó a la plantilla a principios de septiembre que le faltaban las ventas de 500.000 vehículos en relación al periodo de antes de la pandemia, lo que supone el equivalente a la producción de dos de sus fábricas, en un contexto de competencia en China y una débil demanda de eléctricos.
Además, dejó sin efecto varios convenios colectivos en Alemania, entre los que se encontraban la garantía que protegía desde 1994 a los trabajadores contra el despido por razones de empresa y que inicialmente estaba vigente hasta 2029.
Con este movimiento, el grupo dio un paso más para endurecer su programa de ahorro, por el que prevé reducir sus costes hasta 2026 en al menos 10.0000 millones y en el que ya no descarta realizar despidos o cerrar fábricas.
Volkswagen, que presentará sus cuentas de los nueve primeros meses del año el próximo miércoles, vendió un 7,1% menos de unidades en el tercer trimestre del año debido a la caída de la demanda en China y también en el resto de la región de Asia-Pacífico.