El excanciller Heraldo Muñoz afirmó que el escenario actual luego de la elección presidencial del domingo en Venezuela ya lo había anticipado la oposición “cuando enfrentó una competencia muy desigual con innumerables obstáculos, pero además con irregularidades en el acceso a las actas de las mesas, a las actas de votación”.
En diálogo con radio Pauta, Muñoz afirmó que los resultados informados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela no son creíbles, y citó los resultados de los otros candidatos según consignó el CNE.
“Le dieron 4,6 por ciento a todos los otros candidatos, más allá de Edmundo González, a quien se le asignó un 44 por ciento. A todos los demás se le asignó un 4,6 parejo, debieran incluso haber tenido un poquito más de imaginación para ponerle porcentajes distintos”, afirmó.
En esa misma línea, el excanciller aseguró que “el Consejo Nacional Electoral proclamó formalmente a Maduro para la reelección. Entonces, eso hace muy difícil una solución por la vía de eventualmente un diálogo, una negociación”.
“Yo sé que hay gestiones de Brasil, concretamente del ex canciller Celso Morín, una suerte de mediación para que se presenten los datos y se llegue a un eventual acuerdo, cuestión que me parece muy difícil”, advirtió.
Sin embargo, la presencia de un personero brasileño de alto nivel, como Morín, dice Muñoz, podría contribuir a superar este momento de crisis en el país caribeño.
“La presión internacional sirve y de mucho y así lo pide incluso la oposición venezolana”, a pesar de que “no decide lo que va a pasar dentro de Venezuela, porque al final son los propios venezolanos quienes tienen que determinar su propio futuro”.
“Brasil creo que tiene alguna influencia significativa, lo ha tenido en el pasado y el presidente Lula ha tenido un papel sino protagónico, un papel de influencia. Y ha buscado ser cauto en sus declaraciones justamente para preservar esa influencia”, añadió.
Respecto a los hechos que para la oposición constituyen prueba de que hubo un proceso irregular el domingo, así como las últimas acciones del régimen de Maduro, Muñoz dijo que “han quemado las naves”.
“Expulsar los diplomáticos de siete países, incluyendo el nuestro, y retirar los propios, implica decir, bueno, no nos importa el aislamiento”, detalló.
“En ese sentido, creo que queman las naves, se la juegan por el resultado no creíble. Pese a que puede haber habido algún debate interno sobre si presentar o no resultados confiables. Primó la frase aquella de Maduro cuando dijo, mira, yo voy a ganar por las buenas o por las malas. Ganó por las malas“, complementó.
Asimismo, dijo que la decisión de retirar a los funcionarios de la embajada de Caracas en Santiago y expulsar a los diplomáticos chilenos de la capital venezolana en el fondo es un rompimiento de facto de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
“Yo lo que haría, y lo comenté con algunos compañeros y compañeras ex cancilleres, es declarar persona no grata al embajador de Maduro en Chile (Arévalo Méndez). Eso todavía puede ser y se lo he comunicado a las autoridades competentes”, afirmó el exministro de Relaciones Exteriores.
De este modo, el diplomático venezolano se debe ir de Chile, no porque lo imponga el régimen caribeño, sino que “porque nosotros decretamos su salida como persona non grata. A mí me parece que esa sería una señal importante”, dijo Muñoz.