Fue este sábado cuando se informó el fallecimiento de Mario Gómez, uno de los 33 mineros rescatados de la mina San José, hace ya 14 años.
Tras su fallecimiento, el minero Mario Sepúlveda, quien también fue sobreviviente del accidente en la mina, le dedicó unas emotivas palabras a su compañero.
"Ha sido un día lleno de recuerdos y emociones, porque estas cosas te llenan la memoria de tantas cosas y recuerdos como 33. Hoy, especialmente, recuerdo las cosas y las vivencias con Mario Gómez, un compañero minero antiguo, con harta experiencia, alguien que nunca se rindió, siempre estuvo ahí (...) Cuando hicimos tantas cosas para seguir sobreviviendo, él nunca aflojó", dijo en conversación con Meganoticias.
"Nos reímos mucho, cada quien tenía su forma de contar sus anécdotas y todos eran divertidos a su manera. Él tenía muchos sueños, amaba mucho a su familia. Las ganas de seguir viviendo eran única y exclusivamente para sacar adelante a su familia. Tenía muchos sueños con sus hijas, con su gente, un viejo soñador igual que todos nosotros", agregó Mario Sepúlveda.
Mario Gómez falleció a sus 76 años en la ciudad de Copiapó, donde se encontraba recibiendo tratamientos paliativos por su delicado estado de salud, el cual lo aquejaba desde el 2018, cuando fue hospitalizado por silicosis y una fibrosis pulmonar, enfermedades habitualmente relacionadas al trabajo minero.
Al respecto, Sepúlveda indicó que su estado de salud "había salido complicado y este último tiempo se complicó más".
"Lo voy a recordar siempre"
Por otro lado, expresó que "yo lo voy a recordar siempre, a mi manera, a mi forma, nuestra forma de contarnos cosas, nuestra forma de reírnos. Tuvimos muchas diferencias de opiniones, discutimos muchas veces, pero siempre fue con altura de mira, nunca amurrarnos y quedarnos enojados".
"Siempre puso su forma distinta de ver las cosas, pero fue clarito en lo que quería: Sobrevivir para seguir y ver avanzar a sus hijos", concluyó.
Mario Gómez y los detalles de su rescate
Cabe consignar que Mario Gómez fue el noveno minero en ser rescatado aquel 13 de octubre del 2010, luego de que pasaran 69 días atrapado bajo tierra junto al resto de los mineros.
Además, era el más longevo de los 33 y fue el primero en escribir y enviar una carta a su familia desde el interior del refugio.