Distraídos, inquietos, con dificultad para controlar los impulsos y problemas para terminar las labores, son algunas de las señales más claras que indican que un niño puede tener déficit atencional.
De acuerdo a lo señalado por la neuróloga infantil de la Clínica Vespucio, dra. Paola León, el déficit atencional es la condición neuropsiquiátrica más frecuente de la infancia. “Este problema implica diversas alteraciones funcionales del sistema nervioso central, sobre todo en el control de impulsos y en las funciones ejecutivas”, asegura la especialista.
Síntomas más comunes
A los niños que manifiestan signos de déficit atencional les cuesta seguir instrucciones y tienen dificultad para concentrarse, por lo que presentan problemas de aprendizaje y trastornos de conducta, además de alteraciones en su ciclo de sueño y de su alimentación. Las señales más comunes de este mal son: desatención, impulsividad, hiperactividad.
La dra. León asegura que para el diagnóstico de esta dificultad de focalizar y mantener la atención, se deben tener en cuenta los siguientes factores:
-Manifestación temprana; antes de los 12 años.
-Intensidad y frecuencia superior a la normal para la edad y la etapa de desarrollo del niño.
-Deterioro o interferencia de forma significativa en el rendimiento del niño en dos o más ámbitos de su vida: escolar o laboral, familiar y social.
-Que no sea causado por otro problema médico; una droga u otro problema psiquiátrico.
La especialista señala que es fundamental estar atentos a los síntomas, ya que cuando se detecta a tiempo, se disminuye el trastorno en las conductas sociales y el mal desempeño académico. “Si se determina y controla tempranamente, es más probable que se tenga una adultez más sana”, explica.
Tratamiento
La neuróloga infantil sostiene que una vez que el pediatra ha detectado alteraciones que no se explican por factores ambientales o de crianza, y que podrían tener origen neurobiológico, es fundamental contactar a un especialista para hacer un diagnóstico preciso y determinar el camino a seguir.