No más "duckface" o "cara de pato".
Lo que marca la pauta en materia de "selfies" es hoy una nueva tendencia: "la falsa sorpresa".
Si antes nuestros autoretratos consistían en impostar un rostro de inocencia, ternura y coquetería, jugando con la forma de nuestros labios; ahora se ha dado un paso para (tratar de) buscar la originalidad.
Es así como esta moda de "la falsa sorpresa" se está tomando los feeds de Instagram y Facebook de un montón de usuarios a lo largo y ancho del planeta.