Si hace algunos días un hombre hizo noticia por su afán de caracterizarse como perro, esta vez la atención se posa en Nano, una joven nacida en Oslo (Noruega).
Su historia ha sido destacada por medios internacionales, donde muestran la vida de esta mujer que se siente identificada con los gatos, por lo que ha decidido dar un vuelco a su personalidad y ahora pasa los días como un verdadero felino.
Fue hace cuatro años cuando comenzó con esta actitud. Desde entonces se identificó con un gato y comenzó a adoptar conductas felinas a cada paso. Hoy, con 20 años de edad, dice ser feliz con su nueva vida.
Incluso, aseguró en una entrevista que se puede ver a través de YouTube que se comunica maullando, que tiene una sensibilidad superior al resto de los humanos y una vista nocturna que le permite cazar un ratón. También comparte con los felinos el rechazo al agua.
"Me di cuenta que era un gato cuando tenía 16 años y los médicos y psicólogos descubrieron qué era 'esa cosa' que tenía dentro mío. Bajo mi nacimiento había un defecto genético", señaló en su video.
Al ser consultada sobre en qué tipo de situaciones sus sentidos podrían captar imposibles para el resto de las personas, Nano ejemplificó: "Maletas rodando por el piso, llaves sonando en bolsillos, gente con hielo debajo de sus pies".