Una joven argentina intentó terminar con su pololo con un emotivo y largo mensaje que buscaba dejar en claro sus intenciones, pero este ni se dio por aludido.
"Llegó el día. Bah. El día llegó hace rato. Ya pasó. Yo lo supe y creo que vos también. La estiramos lo que pudimos o lo que creímos poder pero… no hay más vuelta que darle", comenzó el texto que le envió a su entonces pareja el pasado lunes cerca de las 08:35 horas.
Aquí le expresó que "la magia ya no está", y que "las mariposas en la panza se transformaron en incertidumbre y ansiedad".
Tras esto, dijo: "Te quiero mucho, claro que sí. Aunque hoy no puedo ni ser objetiva porque te quiero más de lo habitual, te extraño aún cuando te veo y te siento en el medio de la boca del estomago, ahí donde antes me hacia cosquillas la felicidad y hoy el cuerpo me recuerda que tengo que dejarte para volver a estar bien.
Que con vos no va a poder ser porque ya no lo siento así. Ya no te siento así. Ya no estás, aún cuando estás. Ya no sos el brillo de los ojos y la sonrisa porque si. Hoy sos la ansiedad y la incertidumbre. El miedo y la angustia. La distancia y los vidrios que me cortan los pies cuando quiero caminar hacia vos".
El mensaje todavía era más extenso, pero solo hasta esta parte se podía leer en la captura viralizada.
Aquí el entonces novio de Agustina respondió, "buenasss. Una poesía?", algo que generó la indignación de la joven.
"Resulta que escribí un texto larguísimo para, de manera políticamente correcta, explicarle a él que lo estaba dejando. Después de pensarlo y repensarlo, me armé de valor y se lo mandé", compartiendo el mensaje que generó miles de comentarios y likes en Twitter.
Resulta que escribí un texto larguísimo para, de manera políticamente correcta, explicarle a #él que lo estaba dejando. Después de pensarlo y repensarlo, me armé de valor y se lo mandé. Esta fue su respuesta: pic.twitter.com/SBBq994o0k
En diálogo con Blender, la propia Agustina explicó que todo este texto "fue escrito para mí, porque la estaba pasando bastante como el orto", y que "veníamos medio como el culo por unos temas vinculares".
"Nos conocimos enero porque él trabajaba en el club del que yo soy hincha (Quilmes), empezamos a vernos, a vincularnos sexoafectivamente", agregó.
Tras esto, contó que estaban en un bar conversando cerca de las 01:00 horas cuando este se levantó porque no le gustó lo que estaba escuchando y "me dejó sola. Lo esperé cuatro horas para poder hablar".
Al ser consultada sobre si su relación mantenía un acuerdo de exclusividad entre ambos, esta dijo que eso "estaba implícito, no estaba hablado, porque claramente es una persona con la que no se puede llegar a entablar una conversación (...) No estaba disponible intelectualmente".
También aseguró que este "no entendía mi humor" y que incluso le hizo una escena de celos por bailar con uno de sus amigos en una reunión social en su casa.
Luego de tres horas de la respuesta viral, "me mandó un mensaje que decía 'besitos'", diciéndole "se parece mucho a lo que subiste a Instagram. ¿Era para mí?".