Un nuevo estudio arrojó luz sobre un debate familiar que causa intriga desde hace años: ¿Influye realmente el orden de nacimiento en nuestra personalidad? La respuesta, sorprendentemente, favorece especialmente a los hijos del medio.
En concreto, la investigación liderada por los psicólogos Michael Ashtona y Kibeom Lee de las universidades canadienses de Brock y Calgary, analizó datos de más de 710.000 personas que habían rellenado perfiles en un sitio web sobre personalidad, que evalúa seis dimensiones clave: honestidad-humildad, emocionalidad, extraversión, agradabilidad, conciencia y apertura a la experiencia.
Hijos del medio: más honestos y cooperativos según los datos
Los resultados mostraron que los hijos intermedios, aquellos con hermanos mayores y menores, obtuvieron las puntuaciones más altas en honestidad-humildad y agradabilidad, seguidos por los hermanos menores, los mayores y, finalmente, los hijos únicos.
En la escala práctica, esto significa que tienden a evitar la manipulación, muestran poco interés por la riqueza y los lujos, y son más propensos a perdonar y cooperar con otros.
Pero hay más: el estudio descubrió que el número de hermanos también importa. Cuanto más grande es la familia, más altas son las puntuaciones en estos rasgos positivos y esto tendría una explicación bastante lógica: en familias numerosas, la cooperación no es opcional, es necesaria para la convivencia diaria.
"Cuando uno tiene más hermanos, debe cooperar con más frecuencia en lugar de actuar según preferencias egoístas", explican Ashtona y Lee en su estudio, según recoge Live Science, sugiriendo que esta necesidad constante de cooperación podría moldear la personalidad a largo plazo.