En la Región del Maule, hay un romántico que mantiene viva la pasión por las citronetas.
José Campos llega cada día a su taller ubicado en Talca, para refaccionar estos vehículos que marcaron una época, los mismos que transitaron en una etapa dorada hacia la mitad del siglo XX y cuyos primeros ejemplares llegaron a Chile en 1957.
A más de 50 años, José Campos ha hecho del arreglo de las citronetras un estilo de vida. Comenzó a trabajar en mecánica automotriz cuando tenía tan solo 17, cuando decidió dejar el colegio para dedicarse al arreglo de automóviles.
Hoy junto a su hijo dan vida a esta tradición familiar que refacciona autos de época y que incluso utiliza la importación de repuesto para mantener a la citronetas en su estado original con arreglos que bordean los 2 millones de pesos.
Ciertamente, la pasión de José va más allá de los autos, puesto que también formó un club de "citroneteros" que, además de compartir el amor por estas joyas del mundo automotriz, se reúnen para realizar diversas obras sociales.
Revisa la historia, la que fue protagonista del programa Chile Conectado de TVN a continuación: