La brutal colisión entre cuatro buses en la Ruta 5 Norte en la región de Coquimbo dejó a decenas de lesionados y 6 fallecidos. Una de esas víctimas fatales fue Patricio Vega, conductor del bus que se detuvo a prestar ayuda al que había volcado poco antes de las 5:00 de la mañana.
"Como buen compañero que era, los empezó a ayudar", relató su amigo Víctor Valencia, coordinador de Buses Cejer, en diálogo con LUN, donde además reveló los detalles de la última llamada telefónica que hizo el chofer antes de perder la vida.
"Llamé al Pato al celular. Me contó que la situación estaba controlada. Que había ayudado a bajar a la seis personas, que estaban bien, que había llegado otro bus (Pullman Bus) a ayudar y que se había colocado delante de su bus", detalló.
Dicha llama continuó unos minutos más. Vega le explicó que estaba parado detrás del bus volcado, intentando sacar el equipaje. Sin embargo, de un momento a otro el diálogo se vio interrumpido: "De repente me quedé hablando solo. Primero escuché un golpe fuerte y después todo quedó en silencio. Yo decía Pato, Pato, ¿me escuchas? Pero nadie respondía".
Tras ello, Valencia llamó al conductor del bus volcado, quien le dio la trágica noticia sobre su amigo: "Él me contó que había llegado otro bus a exceso de velocidad y que había atropellado al Pato. Que había quedado metido entre los dos buses y que él alcanzó a salvarse de milagro".
Vega había arrancado su turno a las 23:30, en un viaje que comenzaba en Salamanca con destino a La Serena: "Con el Pato estuvimos conversando un ratito. Estaba contento, con su sonrisa de siempre. Compró una bebida para el viaje y dijo que iba a dormir un rato, porque el turno lo empezó otro compañero. Le faltaba menos de una hora para llegar a su destino".