EL Juzgado de Garantía de Arauco desestimó este lunes la solicitud para ampliar, una vez más, la investigación en el caso de la muerte del pequeño Tomás Bravo, hecho ocurrido hace casi dos años en la zona de Caripilún, en la región del Biobío.
De esta manera, el Ministerio Público deberá proceder al cierre de la investigación debido al plazo transcurrido y por estar cerca del plazo legal de dos años de indagatorias.
Justamente esta jornada, la familia de Tomás Bravo, marchó hacia la fiscalía regiónal del Biobío para exigir justicia y respuestas.
Cabe mencionar que la fiscal regional del Biobío, Marcela Cartagena, había solicitado una ampliación de 30 días tras pericias pendientes.
Hasta el día de hoy, sólo existe un imputado: el tío abuelo, Jorge Escobar, quien no posee medidas cauterales por decisión del Juzgado de Garantía y la Corte de Apelaciones, tras considerar que no habían pruebas en su contra.
La familia del pequeño Tomás, llegó hasta el frontis de la fiscalía regional del Biobío junto a una caravana de autos. Su madre, Estefanía Gutiérrez, recordó a su hijo fallecido y exigió justicia.
"Ayer se cumplieron dos años del hallazgo del cuerpo de mi hijo y hoy se termina el plazo legal a la investigación. Estamos aquí para exigir justicia y verdad. Estamos con mi familia y personas que nos quieres apoyar", sostuvo Estefanía.
Enfatizó en que, "estamos para seguir exigiendo verdad y justicia, para que sepan que no nos hemos olvidado de Tomás. Necesitamos una respuesta", finalizó.
Por otra parte, la abuela de Tomás, Elisa Martínez, agregó: "es el término de plazo y no tenemos nada. Es terrible estar acá de nuevo, pero no tenemos que dejar de hacerlo, seguimos luchando aunque nos cierren las puertas (...) como familia no bajaremos los brazos, como familia estamos desilusionados y cansados", sostuvo la abuela.