Un caso tan complejo como insólito. Un vecino compró la mitad de una plaza en Chiguayante. El nuevo dueño asegura que todo está en regla. Intentó cerrar el lugar y sacó los juegos infantiles, aunque todo fue devuelto por la municipalidad. Actualmente, el lugar no puede ser intervenido a la espera que la Corte Suprema resuelva el caso.
Andrés Salas adquirió la mitad de la plaza José Palma Barrera, pero, ¿cómo realizó la compra?: En el 2024 vio un aviso de otro particular que puso en venta un paño de 246 metros cuadrados en la dirección calle Videla 513; sin embargo, se trataba de la numeración asignada de la mitad de un área verde.
En conversación con 24 Horas, Andrés relató que, "fui al conservador de bienes raíces y pedí la documentación para acreditar que efectivamente estaba todo en regla y me lo entraron, también fui a la municipalidad de Chiguayante a pedir el certificado de uso de suelo del terreno el cual era de uso habitacional y comercial".
Además, aclaró que, el lugar, "se ocupaba como plaza, pero siempre fue privado, la mitad es de la municipalidad, pero la otra mitad era de privados. Lo compré pensando a futuro realizar algo, no sé si comprar o negociar, construir, no sé cualquier cosa".
Cabe señalar que, en el Servicio de Impuestos Internos, indica que el paño está a su nombre y el Conservador de Bienes Raíces certificó la compra por 45 millones de pesos.
La compra derivó a una causa en la justicia y, además, la municipalidad presentó un recurso de protección contra Andrés, quien cercó la plaza, sacó las bancas y los juegos del lugar.
De momento, la causa está en manos de la Corte Suprema y —por ahora— hay una orden de no intervenir el área mientras vecinos y niños del sector esperan mantener la plaza.
