"Hablar de salud mental todavía sigue siendo un tema tabú en la población y, dentro de la salud mental, más tabú aún es hablar de suicidio". Con estas palabras, el doctor Francisco Bustamante, psiquiatra de la Clínica Universidad de Los Andes y director del Programa Radar, aborda en "Informe Especial" uno de los temas que más preocupación despierta en la sociedad actualmente y que, poco a poco, se ha convertido en una emergencia silenciosa a nivel nacional.
En primer lugar, el especialista señala que se debe terminar con el tabú y los estigmas respecto a estos trastornos: "El estigma que viven las personas que tienen enfermedades mentales es algo que se ve en todos los países del mundo, pero, por otro lado, cuando la gente empieza a pensar en suicidio es porque viene con una desesperanza muy profunda y siente que ya ha hecho un montón de cosas para poder salir de este estado de sufrimiento que no han dado resultado".
4 DE 10 ALUMNOS DE ENSEÑANZA MEDIA HA PENSADO EN QUITARSE LA VIDA
En cuanto a cifras, el doctor Bustamante explica que "distintos estudios muestran que, aproximadamente, cuatro de cada diez adolescentes de enseñanza media, en algún momento, ha pensado en quitarse la vida. Eso es una cifra súper alta. En algún momento, todo adolescente pasa por algún período crítico y, en ese período crítico, puede llegar a presentar riesgos suicidas".
En base a lo anterior, el especialista apunta que existen muchas variables que pueden incidir en los comportamientos suicidas: "Hay adolescentes que son mucho más vulnerables, tal vez por genética, por las condiciones en donde les ha tocado crecer, por ciertas circunstancias de la vida que caen en cuadros depresivos o caen en ciertas situaciones ambientales que los lleva a pensar mucho más seriamente en la muerte y es ahí donde se presenta la conducta suicida. Eso puede llegar a ser en aproximadamente el 20% de los adolescentes".
"LOS ADOLESCENTES QUE ESTÁN EN RIESGO SUICIDA NO PIDEN AYUDA"
Para el facultativo, es importante que los círculos cercanos enfrenten a tiempo estas situaciones apenas se presenten señales.
"A la gente, en general, le cuesta entender que un adolescente pueda estar tan mal como para poder pensar en quitarse la vida y eso está muy relacionado al estigma de tener alguna enfermedad mental. Esto parte desde los familiares, pasa también por los profesores y también por los profesionales de la salud. Los adolescentes que están en riesgo suicida no piden ayuda, se lo guardan".
Según explica el doctor, "hemos visto que, de los adolescentes que presentan riesgo suicida, casi el 70% o el 80% son adolescentes cuyo riesgo es leve a moderado. Siendo un riesgo leve a moderado pueden ser tratados en sus Cesfam, en sus dispositivos de atención primaria".
"LAS ENFERMEDADES MENTALES ESTÁN MUY LIGADAS AL MANEJO DE LAS EMOCIONES"
También aconseja que se debe aprender a manejar las emociones: "Las enfermedades mentales están muy ligadas al manejo de las emociones. Cuando una persona empieza a pensar en quitarse la vida, es por un sufrimiento emocional muy intenso que no ha podido regular. Una buena prevención del suicidio también va acompañada de un buen manejo emocional y eso se puede aprender".
Finalmente, para el psiquiatra existe una convicción clara: "Sí, el suicidio se puede prevenir. Desafortunadamente llegamos tarde y, a veces, como sociedad, el mensaje que enviamos no es el mejor. Como que estigmatizamos a las personas que tienen enfermedades mentales, ocultamos a las personas que han manifestado ganas de quitarse la vida, los encondemos".
Por lo anterior, sostiene que el trabajo y objetivo del programa Radar es "visibilizar este tema y desestigmatizar".