A cinco días de la reconstitución de escena por el homicidio frustrado de Danitza Araya, la periodista Paz Montenegro, en un nuevo capítulo de Informe Especial, entregó en exclusiva los resultados de un peritaje rucial que, tres años después, comprueban científicamente el origen del disparo que hirió a la detective.
Actualmente, el único imputado por el homicidio de la joven, Cristián Cayupán, cumple condena —15 años— en la cárcel Colina 1 y de accedió a dar su testimonio por primera vez en televisión.
El condenado dice que es culpable del atropello de Danitza, pero inocente de las graves lesiones que mantienen a la detective en silla de ruedas. "Fiscalía se ensañó comigo, la PDI mintió para favorecer a sus compañeros, para encubrirse y para que la institución no pierda prestigio", aseguró.
Por su parte, la víctima también acusa irregularidades en la primera investigación y denuncia abandono durante su rehabilitación. "Di todo por la institución, por el país, me mintieron y siguieron mintiendo por años", indicó la joven.
Operativo en el que Danitza Araya fue herida
El 21 de octubre del 2019, en el marco de las manifestaciones, desórdenes e incidentes del estallido social, una turba arrasó contra un supermercado Mayorista. Al procedimiento llegó Danitza y sus compañeros.
"Salí con mi vehículo, iba a echar bencina y pasé por un supermercado que estaba siendo saqueado, entonces me detuve a observar", relató Cayupán sobre aquel fatídico día.
Por su parte, Araya indicó que "la gente pedía auxilio y tenían miedo de que entren a sus casas que están frente al supermercado (...) yo estaba en el maletero del vehículo (policial) y fui la última en bajarme. Estaba con el chaleco, con mi placa, con mi uniforme institucional, con todas mis especies fiscales y mis pertenencias".
El condenado señaló que en ese momento, cuando los funcionarios descendieron de los autos fiscales, "inicié la marcha de mi vehículo porque estaban disparando", ante lo cual, Danitza solicitó que frenara para fiscalizarlo: "Me percato que va saliendo un automóvil gris del supermercado, le comienzo a hacer señas para que pare y él de un momento a otro acelera, en segundos".
"Giré en 'u' y empezaron a dispararme a mí, los vidrios de mi vehículo se estaban reventando, yo me agaché y cuando iba agachado escuché un ruido, algo topó. En ese momento yo no me di cuenta de lo que pasó, qué originó ese ruido, entonces yo miré hacia adelante, no vi nada y solamente doblé", agregó Cristián.
En tanto, la detective detalla que "se fue en contra de mí y de mi compañero (...) en ese momento sé que lo hizo intencionalmente, porque yo lo vi, yo lo viví, a mí me impactó. Cuando caigo me intento volver a parar y me di cuenta que mis piernas ya no funcionaban, no me estaban respondiendo".
En las imágenes captadas por vecinos se ve cómo los compañeros de Danitza disparan contra el automóvil que se dio a la fuga tras haber atropellado a la mujer.
"Al momento en que yo iba en retirada, me doy cuenta que tenía mucha sangre en la espalda y ahí me percaté que tenía una herida. Uno de esos balazos me llegó en la espalda y un balazo también le llegó a la funcionaria. Las únicas personas con armas era la PDI", contó el conductor.
Entre la vida y la muerte
El jefe y los compañeros de la detective Araya la trasladaron al hospital. En el sitio del suceso quedó su chaleco antibalas que le habían sacado previamente.
Una vez intervenida, el pronóstico no era bueno y los médicos que la trataron dieron terribles noticias a los padres, pues estaba entre la vida y la muerte.
"Nos dijeron que la iban a estabilizar 'para que se puedan despedir de ella', esas fueron sus palabras", señaló Juan Luis Araya, papá de Danitza.
El daño provocado por el proyectil "es grave", así los constataron los informes médicos, y aún con estos antecedentes, las querellas presentadas por la PDI, la familia y el Ministerio del Interior, al igual que la formalización de la Fiscalía, solo llevan el nombre del conductor que atropelló a la mujer.
Por su parte, el imputado, que también recibió un impacto de bala, fue operado de urgencia en el Hospital San Juan de Dios.
"Ahí perdí un riñón, un pedazo de hígado y de bazo, y al otro día me formalizaron ahí mismo en el hospital", agregó Cayupán.
🟥 #InformeEspecialTVN Las querellas presentadas por la PDI, la familia y el Ministerio del Interior, al igual que la formalización de la Fiscalía, sólo llevan el nombre del conductor que atropella a Danitza.
— Informe Especial (@iespecial) November 24, 2022
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Investigación
Mientras la víctima y su familia se dedicaban a la recuperación, comenzó la investigación; peritajes, diligencias, análisis, evidencia desde el sitio del suceso y del automóvil del imputado, que por instrucción del fiscal de pudahuel, Rodrigo garrido, levantó la propia PDI.
"Consulté (por el origen del disparo) y me dijeron que había sido un disparo al aire, que no se había encontrado el proyectil ni la vainilla, nada (...) que era de los mismos asaltantes, esa fue la explicación. ¿Por qué iba a desconfiar?, eran mis compañeros, mi institución, con quienes conviví todo ese tiempo", expresó la joven.
Durante el proceso, la declaración del detective Daniel Jofré, es clave, pues fue testigo privilegiado del hecho al estar al lado de su compañera al momento del incidente, puesto que indicó: "A raíz del golpe (atropello) es factible que haya efectuado un disparo de manera accidental".
"La PDI efectúa tres disparos antes, Danitza recibe el cuarto disparo de esta secuencia. Quiero hacer presente que el Lacrim, que es el laboratorio forense de la institución, sí hizo los peritajes e indicaban que las únicas personas que dispararon fueron funcionarios", acotó Carlos Gutiérrez, doctor en Ciencias Forenses que analizó las imágenes registradas ese día.
¿Qué pasó con el chaleco antibalas?
En el sumario administrativo se deja constancia del extravío de la evidencia y se ordena su búsqueda en distintas unidades, sin resultados.
"Si a ellos se les pierde una evidencia de una colega, ¿qué queda para los demás? Me da mucha desconfianza que se haya perdido un chaleco (...) dicen que estaban vencidos, puede que los hayan escondido por eso. el chaleco no se perdió, lo escondieron", aseveró el padre de Danitza.
Tras 16 meses de investigación, en marzo de 2021, la fiscal Ana María Miño Retamal cierra el sumario. En sus conclusiones descarta responsabilidades administrativas de los funcionarios. Además, señala que el chaleco debe "darse de baja".
Dos años después el chaleco de protección apareció y en su interior encontraron evidencia clave para verificar el origen del disparo que recibió la detective Araya.
El origen del disparo
El documento exclusivo al que tuvo acceso la periodista Paz Montenegro, contiene las pericias realizadas al chaleco antibalas de la detective y del proyectil que, tres años después de los hechos, aún se mantenía en su interior.
Las diligencias establecen que la evidencia balística se ubica en la zona inferior posterior derecha del panel de protección, el cual se corta y se abre para extraer el proyectil. Además, sorprende la mancha de sangre que corresponde a sangre humana de perfiil genético de sexo femenino.
El análisis se aboca a las comparaciones de proyectil extraído con los tiros de prueba de las 13 armas de la PDI que tienen algún tipo de participación en el operativo del 21 de octubre del 2019 y con las ocho vainillas halladas en el sitio del suceso.
En el estudio microscópico, la bala presenta una correlación positiva con siete de las ocho vainas recogidas en Pudahuel, de tiros percutidos por la misma pistola.
Por lo tanto, el informe de Labocar confirma científicamente que la bala que hiere a Danitza sale del arma de su compañero Daniel Jofré Araya.
Con estos antecedentes, el próximo lunes 28 de noviembre a las 9 de la mañana, la Fiscalía encabezará la reconstitución de escena por el homicidio frustrado de Danitza y se procederá al nuevo proceso judicial.