En zonas rurales de China es común que los padres del novio tengan que pagarle dinero a la familia de la novia para que se puedan casar.
Hay que "comprarle una novia al hijo" porque de lo contrario, se quedará soltero.
El precio varía sustancialmente de región en región porque está relacionado con el nivel de ingresos de la comunidad y la falta de mujeres.
El problema es que en los últimos años el valor se ha ido a las nubes, según informan medios locales.
En algunas provincias, la familia del novio tiene que ofrecer una casa y un poco de dinero en efectivo. En otros, se paga con joyas, efectivo y regalos.
El precio oscila entre los US$17.000 y los US$40.000, aunque en muchos casos los arreglos que se hacen entre familias quedan en el misterio de la vida privada.
En el norte del país, no es extraño que en algunos pueblos la familia del novio gaste el equivalente al salario de dos años de trabajo.
Y hay casos donde el precio se ha disparado aún más.
Es lo que ocurre en la pequeña aldea de Da'anliu en Shijiazhuang, provincia de Hebei, donde las autoridades se cansaron de que las novias costaran hasta cinco veces más que el salario promedio de un año y decidieron poner un límite para evitar el endeudamiento.
La nueva medida establece que cualquiera que solicite o pague más de 20.000 yuanes (cerca de US$3.000), será acusado de "tráfico humano".
Sin embargo, la regla fue establecida como un gesto simbólico, dado que por ahora no tiene efectos legales.
Demasiados hombres en China
El alza en el valor de las novias se explica como una consecuencia de la política de un solo hijo.
Dada esa restricción, las familias chinas por años prefirieron los bebés de sexo masculino.
Cuando nacían niñas, en muchos casos las abortaban o las dejaban en un limbo burocrático sin registrarlas, hasta que se puso fin a esa política en 2016.
Se estima que actualmente hay unos 30 millones más de hombres que de mujeres en el país, un desbalance que es muy poco común en otras partes del mundo.
Pero además de esa disparidad numérica, la expansión económica de China en la última década ha provocado que en algunas zonas rurales las mujeres adolescentes se vayan a centros urbanos en busca de una mejor educación o trabajo.
El alto endeudamiento matrimonial ha dejado a muchas familias sin los recursos necesarios para cuidar a los más pequeños o los ancianos, provocando un problemas social que genera conflictos entre las comunidades.
Ahora puedes recibir notificaciones de BBC News Mundo. Descarga la nueva versión de nuestra app y actívalas para no perderte nuestro mejor contenido.