La Fiscalía Regional de O'Higgins está investigando a Ricardo Ezzati por cuatro casos de encubrimiento de abusos sexuales cometidos por miembros de la Iglesia Católica nacional. 

Pese a que inicialmente se conocían tres causas: la del excanciller del Arzobispado de Santiago, Óscar Muñoz Toledo, y las de los sacerdotes Jorge Laplagne y Tito Rivera, también se suma una arista del caso Karadima, según informó El Mercurio. 

En el caso de Muñoz Toledo, el cardenal está acusado de no iniciar la indagatoria cuando se recibieron las denuncias en contra del religioso. 

El ahora arzobispo emérito se habría limitado a ordenarle al presbítero acusado de asesorarse, de acuerdo a los antecedentes reunidos hasta ese momento. 

Sobre la causa de Laplagne, removido de su cargo, este último tras declarar en octubre pasado ante el Ministerio Público reconoció haber sostenido reuniones con Ezzati, en las que se le informó de la investigación en su contra. 

Sobre Tito Rivera, el denunciante del sacerdote acusó al cardenal de ofrecerle 30 mil pesos y pedirle orar por el presbítero, una vez que esta persona le contó sobre los abusos que habría sufrido el año 2015 al interior de la Catedral de Santiago. 

Por último, en el caso de Fernando Karadima, la fiscalía mantiene investigaciones vigentes. Ezzati ha sido acusado de encubrimiento constantemente por las víctimas del ex párroco de El Bosque.