Impactó causó la muerte de Ana Luisa Guzmán Contreras, joven enfermera de 32 años y funcionaria del Hospital Salvador que perdió la vida este jueves tras ser impactada por un auto que había sido robado por un delincuente de 17 años, en Ñuñoa.
La víctima iba junto a su pareja a bordo de un taxi tras celebrar su cumpleaños, pero en la esquina de José Domingo Cañas con Grecia fue chocada de lleno por el vehículo manejado por el antisocial.
Este último resultó con heridas menores, siendo detenido por Carabineros y enfrentará la justicia durante esta jornada por el delito de homicidio, donde se pedirá su internación provisoria al ser menor de edad.
Consultado por su actuar, el aludido se limitó a decir que "me arrepiento mucho de haber robado ese auto, de verdad".
Por su parte, la familia de la víctima pidió justicia y castigo para el responsable, agregando que "acá no hay perdón".
"Era una persona realmente maravillosa, llena de luz. No puede ser que esto ocurra, mi prima está muerta", señaló una familiar de Guzmán.
Teresa Guzmán, tía de la joven, dijo que la aludida "tuvo que atender muchas veces a este tipo de delincuentes, entonces que le pase esto a ella es horrible".
"Espero de verdad que la justicia cumpla, que pague en la cárcel", sentenció.