El geógrafo Marcelo Lagos se refirió en el matinal Buenos Días a Todos de TVN a la seguidilla de temblores registrados en la zona centro y norte del país desde la madrugada de este miércoles, aseverando que corresponde a un "enjambre", donde "la amenaza sísmica es latente".
Concretamente, la mayoría de los movimientos fueron cerca de Los Vilos, región de Coquimbo, dentro de los cuales al menos dos tuvieron magnitud igual o superior a 5.0.
Desde el Centro Sismológico Nacional cifraron en al menos 30 los movimientos en las últimas horas, cuyo epicentro fue en Los Vilos.
Lagos indicó que todo lo que está entre las regiones de Coquimbo y Valparaíso "corresponde al límite sur de la gran ruptura que tuvimos el 16 de septiembre del 2015 por el terremoto 8.4 que afectó la costa de esa zona".
El experto continuó explicando que, en las últimas horas, "se ha concentrado un conjunto de eventos a profundidades más o menos similares: 18 a 20 kilómetros de profundidad, son relativamente cercanos a superficies, con magnitudes que fluctúan entre los 4.8 a 5.2 dependiendo de la fuente. Son todos muy parecidos, independiente a que estos generen otros más pequeños".
"Cuando los eventos se localizan en un sector muy confinado y tienen magnitudes más o menos parecidas, el concepto que se utiliza inicialmente es 'enjambre'", sostuvo el geógrafo.
Asimismo explicó que "todos los sismos que generalmente ocurren hacia el océano tienen profundidades más superficiales, y a medida que van avanzando hacia el continente, este tipo de terremotos va avanzando en profundidad".
El especialista además dijo que este dichos temblores conocidos como "terremotos interplaca, que ocurre entre las placas, es uno que va entre los 0 y los 60 kilómetros de profundidad, que es la zona donde se acumula mucha energía, en zonas costeras, y donde ocurren los terremotos más grandes que han caracterizado la historia y prehistoria de nuestro país".
Lagos enfatizó que "no hay que descartar un escenario que podría ocurrir en el centro de Chile". Asimismo, "entre Los Vilos y Pichilemu, es una zona que no tiene un terremoto importante desde el 8 de julio de 1730, que es uno de magnitud muy grande, muy parecido a de 1960".
Recalcó además que "desde Los Vilos al sur nada se ha movido de forma importante, por lo tanto es una zona donde hay tensión acumulada", no descartando que se pueda desarrollar un "gran evento".
Sin embargo, remarcó que "los enjambres generalmente aparecen, se concentran y luego de un tiempo desaparecen, pero de alguna forma nos revelan que la amenaza sísimica es latente y es bueno de alguna forma que ocurran, porque estas señales de la naturaleza nos permiten poner sobre la mesa estos temas para estar preparados y no nos encuentre por sorpresa un evento de gran magnitud".