Johanna Hernández, la condenada como asesina del profesor Nibaldo Villegas, cumple una cadena por homicidio perpetuo calificado, teniendo que estar 40 años privada de libertad para recién poder aspirar a algún beneficio carcelario.
La mujer reside en la Sección de Custodia Directa del Centro Penitenciario Femenino (CPF) de Santiago, destinado a internas cuyos delitos hayan sido de connotación pública y requieran resguardo.
Lucía Vega, alcaide del CPF de Santiago, detalló que esta área "es una de las 12 existentes en la cárcel, donde hay internas con connotación pública. Entonces, para su resguardo físico, se optó por esta zona aparte".
Asimismo, Muriel Esquivel, socióloga de Gendarmería, afirmó que en el terreno hay dos dormitorios, los cuales fueron creados hace poco más de 10 años tras la llegada de María del Pilar Pérez, 'La Quintrala', y Jeanette Hernández, conocida por el brutal homicidio y golpiza a sus hijos Esteban y Pablo Rojo.
Desde Gendarméria explicaron a 24 Horas que Hernández comparte este módulo especial con otras cinco internas, agregando a Kimberly Medina, condenada en 2018 por matar a su pequeño hijo no sin antes dar aviso del delito por Facebook.
Igualmente, en esta zona habitó Natalia Guerra, quien en 2012 fue condenada por integrar la "Secta de Colliguay", donde usó a su bebé recién nacido para ser "sacrificado".
"Fue mi compañera, mi amiga. Comíamos juntas, era una buena persona", dijo Hernández sobre la mujer que hoy cumple el beneficio de libertad condicional.
Para Leandro Villegas, hermano del docente asesinado, dicha sección es un círculo "donde están las mujeres más malas de Chile", reiterando la culpabilidad y frialdad de la condenada por el homicidio de su familiar.
PODRÍA LLEGAR LA MAMÁ DE ÁMBAR
Johanna Hernández también fue consultada por la posibilidad de que Denisse Llanos, madre de Ámbar Cornejo, también llegue a dicha cárcel en caso de ser condenada por el crimen de su hija.
Tanto Johanna com Denisse se conocían desde que sus hijos iban al jardín, recordó Hernández, criticando la calidad humana de quien se encuentra aún en prisión preventiva.
"Recuerdo a Ámbar. Recuerdo cuando la iba a buscar y la tironeaba. Fue fuerte saber del caso. Yo no tendré contacto con ella porque no soy nadie para juzgar, pero si me hago amiga de ella o mantengo una relación mi hijo mayor se enterará y lo perderé. Es macabro lo que hizo, más con una hija", sentenció.