Compleja es la situación que enfrenta el país debido al aumento explosivo de casos de coronavirus, llegando al peak de nuevos contagios en lo que va de pandemia, y lo que ha conllevado también una saturación de las camas críticas.
Eduardo Tobar, médico intensivista y jefe técnico de la Unidad de Pacientes Críticos Hospital de la Universidad de Chile, explicó en conversación con el Canal 24 Horas que "la demanda en servicio de urgencia es permanente, llegando todos los días dos o tres pacientes que requieren una cama UCI o de cuidados intermedios".
Por lo mismo y "con los casos que hemos visto durante los últimos días, lo que uno puede esperar de aquí a 10 o 14 días, es que esto empeore, desde el punto de vista de las camas críticas".
Ante esta situación, aseveró que la autoridad debe tomar medidas más estrictas, ya que "la única cosa que podemos hacer es bajar el número de casos, para con eso capear el temporal".
Por otro lado, precisó que hay otros tres factores que inciden negativamente en la saturación del sistema. El primero de ellos es una baja del 20 o del 30% del personal de salud por licencias por salud mental.
"Y, por otra parte, tenemos una carga importante de pacientes con patologías no COVID que también demandan camas y eso dificulta el acceso".
Por último, "todo el mundo está más cansado (...) Nuestro personal está quemado, agobiado, frustrado y legítimamente lo manifiestan en la salud física o mental. Cada vez vamos quedando con menos personal", manifestó.
Respecto del efecto vacunación, el intensivista aseveró que al menos queda un mes para que se vea un efecto positivo.