Durante el próximo mes, y una vez por semana, Sindy Ortiz, la joven madre de Talcahuano que fue separada de su hija al nacer por reconocer que fumó marihuana durante el embarazo, deberá someterse a un test de orina para garantizar que no ha seguido consumiendo cannabis o algún tipo de droga.
Así quedó determinado en la audiencia a la que asistió la joven junto a su pareja, desarrollada en el Tribunal de Familia de la ciudad sureña y en la cual además se estipuló que a la pequeña Luciana se le hará un seguimiento médico que durará seis meses. El motivo es para monitorear su salud.
Cabe recordar que esta mañana se ratificó que la lactante, de semanas de edad, permanecerá de manera definitiva con sus papás.
Conoce en profundidad los detalles de la audiencia a través del siguiente reporte: