"Haga una reflexión de lo que está pasando en su casa, en la Universidad Católica de Chile. Quizás es necesario pedirle perdón a todas las víctimas que no fueron acogidas y esa sigue siendo la situación hasta hoy en día".
Con esas palabras, la ex estudiante de la Pontificia Universidad Católica (PUC), Janneke Noorlag, emplazó durante un acto oficial al rector Ignacio Sánchez por el hecho ocurrido en 2015, cuando fue violada por uno de sus compañeros de magíster.
Al relatar lo sucedido, la estudiante cuenta que ese día "decidimos con unos compañeros salir del campus e ir a una fuente de soda a tomar unas cervezas. Desde ese primer bar, yo no tengo una memoria clara".
Agrega que la drogaron, y que recién a la mañana siguiente despertó desnuda en una cama: "Me di cuenta que estaba en un departamento con dos hombres, uno de los cuales era compañero mío (...) Me dijeron que hubo penetración y que no se habían cuidado".
Tras el episodio, fue internada bajo el estado de shock en el que se encontraba, mientras que un mes le costó decirle a su marido lo que le había sucedido y realizar la denuncia ante la Fiscalía.
"Yo no recibí ninguna acogida, ningún apoyo y después de todo el daño que la universidad hizo en mi caso, tampoco recibí ningún acto reparatorio", fue otro de los emplazamientos que hizo al rector Sánchez. La autoridad académica, por su parte, respondió en el mismo acto que "me gustaría conocer la situación puntual, en qué medida se puede reparar un daño muy tremendo y yo solidarizo con lo que usted dice".