Una reciente denuncia realizada en Las Condes por una joven que asegura haber sido drogada en una discoteque para luego ser despojada de su dinero y otras pertenencias generó la preocupación en las autoridades por el uso que se da en ámbitos delictuales a la droga conocida como burundanga.

Fue el Instituto de Salud Pública la institución que publicó una serie de aclaraciones al respecto para que la población en general tenga presente los riesgos asociados a los efectos de la suministración de este alcaloide cuyo nombre real es Escopolamina.

En primer lugar, consigna que "tiene ciertas propiedades alucinógenas y estimulantes. La presentación por lo general es un polvo blanco cristalino, de sabor muy amargo, y provoca sedación, o una amnesia anterógrada, es decir la persona no recuerda lo que pasó previo al uso de la sustancia cuando se consume por vía oral, por ejemplo en bebidas, o en cápsulas".

La inhibición de la voluntad y la pérdida de memoria son precisamente los hechos que los distintos denunciantes afirman haber sufrido previo a ser víctimas de ilícitos como robo de dinero, robo de distintas pertenencias e, incluso, violación, como ocurrió con la mujer de 27 años de Las Condes.

Un factor importante que da cuenta el ISP es que los efectos más nocivos se relacionan con el consumo de burundanga por la vía oral.

Para Boris Duffau, jefe del subdepartamento de Sustancias Ilícitas del ISP, "es importante señalar que Escopolamina tiene muy poca absorción por la piel, así que no sería posible poder someter a una persona sólo con el hecho de tocarla, o tocarla con un papel impregnado con la sustancia y provocarle una sedación para que un delincuente pudiese cometer algún ilícito contra esta persona".

En tanto, el ISP hizo un llamado a que, en el caso que se sospeche una intoxicación por Escopolamina, lo importante es concurrir rápidamente a un servicio de urgencia, porque puede ser una intoxicación aguda. Hay que considerar que por vía oral una dosis tóxica es de 1 gramo de Escopolamina.