La ex directora del Sename, Marcela Labraña llegó hasta la Fiscalía Metropolitana Centro Norte para declarar en calidad de imputada en el marco de la investigación sobre las muertes de menores registradas entre 2005 y 2016 en centros dependientes del organismo que lleva adelante el fiscal Marcos Emilfork.
El pasado diciembre, Labraña también declaró en calidad de imputada respecto al caso de la muerte de Lisette Villa, cuya muerte destapó una serie de falencias en el Sename que terminó con sumarios y controles internos. En primera instancia, la exdirectora del servicio informó que su deceso fue por un paro cardiorrespiratorio a raíz de una crisis de angustia, hipótesis que aún es investigada por el Ministerio Público.
En abril, y en conversación con Tu Mañana, Labraña aclaró sus dichos, señalando que "cuando me preguntan si ese día la niña tenía pena, yo contestó que sí, que efectivamente tenía pena (...) Y luego me dicen '¿entonces murió por pena?', y yo me doy vuelta y digo 'no, nadie muere por pena'. Es importante aclarar porque no se ha entendido por cual Lisette también llevaba mucho tiempo muy frágil emocionalmente".
Labraña había sido citada en agosto pasado, instancia en que llegó hasta el Centro de Justicia pero hizo uso de su derecho a guardar silencio.
Durante esta jornada, se espera que la imputada se refiera a la muerte de otros tres menores al interior del Sename cuando ella oficiaba como directora.
Recordar que en 2016, el persecutor solicitó a la PDI levantar investigación respecto a las 1.313 muertes de niños en centros dependientes o colaboradores del organismo.