Tras la advertencia de Hamás de que no realizaría el intercambio de rehenes programado para este sábado por “violaciones del enemigo”, Donald Trump aseguró este lunes que, si la devolución no se concreta, habrá graves consecuencias.
"Por lo que a mí respecta, si no devuelven a todos los rehenes antes del sábado a las 12 —un tiempo apropiado—, lo que diría es que cancelemos todo y todo está permitido, y dejaremos que se abra el infierno", aseguró el mandatario desde el Despacho Oval tras la firma de varias órdenes ejecutivas.
Asimismo, le dio luz verde al país de Benjamín Netanyahu para tomar represalias, sin descartar un posible involucramiento de EE.UU.: "Lo digo en mi nombre. Israel puede hacer lo que considere".
"La puerta sigue abierta para el intercambio", afirmaron, sosteniendo que están dispuestos a ceder siempre y cuando Israel cumpla con los requisitos y plazos pactados durante el inicio del alto al fuego.
Sin embargo, tras el reciente anuncio de la muerte de Shlomo Mansur, un rehén israelí secuestrado por Hamás, la situación podría complicarse.