Más de 300 ciudadanos israelíes han muerto como consecuencia del ataque llevado a cabo el sábado desde la Franja de Gaza por el grupo islamista Hamás contra el territorio de Israel, informaron este domingo medios de este país que citaron fuentes médicas.
La cifra de fallecidos podría aumentar en las próximas horas, dada la gravedad de algunos de los heridos, cuyo número asciende ya a casi 1.600, indicaron las fuentes.
Por el lado palestino, la cifra de muertos asciende a 232 y la de heridos a 1.700, según fuentes del Ministerio de Sanidad de Gaza, territorio controlado por Hamás desde 2007, cuando expulsó a las fuerzas del movimiento nacionalista Al Fatah, del presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás.
El Ministerio de Sanidad de Gaza acusó a las fuerzas israelíes de haber atacado deliberadamente a personal médico y hospitales, causando tres muertos entre trabajadores de la salud, hiriendo a otros tres y destruyendo cinco ambulancias.
De acuerdo con fuentes palestinas en la franja, al menos cinco edificios han quedado derruidos en Gaza por bombardeos israelíes y los hospitales están en estado de emergencia ante la situación.
En Gaza, miles de civiles de localidades en el norte de la franja como Beit Hanoun, Jabalia y Beit Lahia fueron evacuados y huyeron a la ciudad de Gaza para ser alojados en escuelas de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos por la dureza de los enfrentamientos.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, afirmó el sábado que el Ejército de su país utilizará "todo su poder" para destruir a Hamás, e instó a los palestinos a abandonar la Franja de Gaza al advertir de que reducirá "a escombros" los escondites de los milicianos.
"Las Fuerzas de Defensa de Israel están a punto de utilizar todo su poder para destruir las capacidades de Hamás", dijo Netanyahu en un discurso televisado, el segundo desde que el movimiento islamista lanzó un ataque sin precedentes por tierra, aire y mar.
"Los destruiremos y vengaremos con fuerza este día oscuro que han impuesto al Estado de Israel y a sus ciudadanos", subrayó.