Los cerdos que el artista chileno Marco Evaristti planeaba dejar morir de hambre en una exposición en Dinamarca fueron rescatados.
Según Evaristti, la obra titulada "Y ahora te importa" tenía como propósito concientizar respecto a la crueldad animal, mostrando la cruda realidad de la industria de la carne. En la exhibición, los tres animales fueron puestos en una pequeña jaula sin agua ni comida, a la espera de una lenta muerte.
No obstante, quienes quisieran acabar con su sufrimiento podían acceder a un arma apernada a un costado para matarlos, tal como si fuera un matadero.
El rescate de los cerdos
Para lograr este esperado rescate, el chileno fue traicionado por su propio amigo: Casper Steffensen, quien era cercano al artista y, además, uno de sus colaboradores, pero no soportó ver a los animales sufrir.
Según AP, la gota que rebalsó el vaso para el hombre fue el desesperado pedido de su hija de 10 años, luego de que descubriera el macabro futuro que les esperaba a las criaturas. "Por favor, asegúrate de que los cerditos no mueran", le habría dicho.
Steffensen esperó a que su amigo se distrajera y permitió el ingreso de un grupo de activistas que liberaron a los cerdos.
Asimismo, agregó: "Pero luego lo pensé durante algunas horas y me di cuenta de que, al menos de esta manera, los cerditos tendrían una vida feliz (...) Recibí muchos mensajes de odio de todo el mundo. Creo que la gente no entiende que mi arte trata sobre los derechos de los animales".
Finalmente, Lucía, Simón y Benjamín, los tres cerdos involucrados, están a salvo y serán subastados al mejor postor que garantice darles una buena vida.