El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, aseguró este lunes que su país, así como el resto de América Latina, no se pueden "dejar provocar" por el mandatario estadounidense, Donald Trump, ni andar "al paso que ellos quieren imponer".
Durante una intervención telemática en la reunión de trabajo extraordinaria de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) que se realiza este lunes en Caracas (Venezuela), Díaz-Canel reiteró su advertencia de que "toda la región" está bajo la "amenaza" de la nueva administración estadounidense.
"Hoy ese Gobierno de los Estados Unidos pretende definir las opciones para los países de la región que son o someternos o ser objeto de agresión", criticó el mandatario insular.
También censuró la política migratoria del republicano, al resaltar que las deportaciones siempre deben realizarse "en el marco de acuerdos bilaterales" y cargó nuevamente contra la decisión de enviarlos a la base naval de Guantánamo.
"Constituye un acto barbárico", aseguró. "Sin ninguna duda, en el escenario político y geoestratégico actual, se van a exacerbar los abundantes y muy diversos factores irritantes entre los Estados Unidos y nuestra América".
Este lunes, líderes de los diez países miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) se reúnen para discutir sobre la migración y otros asuntos relacionados.
Este encuentro fue anunciado luego de que el Gobierno de Estados Unidos revocara la extensión del permiso TPS para venezolanos hasta 2026 -que había aprobado su antecesor, Joe Biden-, y dijera que evalúa utilizar instalaciones para migrantes en la base militar de Guantánamo, en Cuba, para retener a hasta 30.000 personas en situación irregular en el país norteamericano, entre otras medidas y declaraciones.
Por otra parte, la ALBA también tiene previsto "evaluar los avances y resultados en cada una de las iniciativas acordadas en las áreas económica, social y política", además de abordar "la defensa de la soberanía y la paz" de América Latina y el Caribe.