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No pierde la esperanza: adulta mayor lleva cinco años "viviendo" en terminal de buses esperando a su hijo

María de Jesús Mundo se hizo conocida como "la abuelita de los camiones", y todos los días espera reencontrarse con su familia en la ciudad de Puebla.

24horas.cl

Martes 16 de julio de 2024

Una desgarradora historia es la que se dio a conocer en la ciudad de Puebla, en México. Y es que la prensa local mostró la realidad de María de Jesús Mundo, una adulta mayor de 78 años, que lleva cinco años "viviendo" en un terminal de buses esperando por el regreso de su hijo y que llegue a buscarla para vivir juntos otra vez. 

De acuerdo a lo informado por el medio Univisión Noticias, en 2018 María de Jesús acompañó a su hijo hasta la Central de Autobuses de Puebla, lugar en que el joven tomó un bus para emprender su viaje y encontrar una vida mejor. Desde ese momento que su madre se encuentra esperándolo, viajando todos los días desde su casa hasta la terminal y pasando todo el día ahí, prácticamente viviendo en el lugar, sin perder la esperanza de volver a verlo. 

"Ahorita dónde esté, que esté bien, es lo que me importa. Dios dirá lo que sigue al siguiente momento. El hombre propone y Dios dispone, que sea su voluntad", expresó la anciana, quien como parte de su rutina diaria en la terminal de buses se dedica a cantar para la gente que transita a cambio de ayuda monetaria, lo que la llevó a ser conocida como "la abuelita de los camiones, o la abuelita que canta". 

María de Jesús comentó al medio en qué consiste su día a día en la estación de autobuses, la cual se basa en esperar en alguno de lo asientos o conversar con la gente. "Llego y pido un tamal, más tarde me siento adentro donde están las bancas, hago unas canciones y la gente me ayuda con eso", relató, destacando que esta es su rutina diaria desde hace cinco años. 

Con respecto a su hijo, se desconoce qué sucedió con él, las razones de por qué no ha regresado con su madre en estos cinco años o cuál es su paradero actual. La única información que se tiene sobre él es su nombre, Víctor Manuel Rivas Mundo, y que tiene dos hijas.

En lo que resta, María de Jesús no duda en seguir pasando sus días viajando diariamente hasta la Central de Autobuses de Puebla, esperando volver a reencontrarse con su hijo y verlo una vez más, todo mientras recibe el cariño de la gente que conoce día a día.