El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo este lunes que el "extremismo fascista" -como suele llamar a la mayor coalición opositora, Plataforma Unitaria Democrática (PUD)- pide en el país caribeño una "guerra civil" como la de Siria, donde cayó el régimen de Bachar al Asad, aliado del chavismo, y llegaron al poder los islamistas y las fuerzas rebeldes.
"Nosotros estamos observando el desarrollo de circunstancias dolorosas para el pueblo de Siria. Ahora salen la descocada, los descocados del extremismo fascista para pedir que en Venezuela también se arme una guerra civil", aseguró Maduro sin mencionar nombres ni mostrar pruebas sobre su afirmación, durante un acto transmitido por el canal estatal VTV.
Asimismo, el mandatario expresó que, ante esta supuesta petición de "guerra civil", el pueblo de Venezuela va a "triunfar por el camino de la paz" en "fusión perfecta popular-militar-policial".
"Al imperio y a la derecha fascista se les agotó el manual de las conspiraciones. Han aplicado todo contra Venezuela. Cada vez que hay un suceso en el mundo ellos quieren que pase en Venezuela", manifestó Maduro.
Este lunes, el Ejecutivo venezolano dijo que espera que en Siria el pueblo "pueda encontrar un camino hacia la resolución pacífica de sus diferencias, sin la injerencia externa ni el uso de la violencia como mecanismo para abordar los conflictos políticos".
Asimismo, exhortó a la comunidad internacional a promover soluciones que "contribuyan a la paz, erradiquen la violencia y el terrorismo, y construyan vías de desarrollo integral" en la nación árabe.
La Siria de la familia Al Asad, que gobernó el país desde 1971, colapsó este domingo a manos de los insurgentes liderados por el Organismo de Liberación del Levante (Hayat Tahrir al Sham o HTS, en árabe), que tomaron Damasco sin apenas resistencia tras apenas 12 días de ofensiva.
Este lunes, la Embajada de Siria en Rusia confirmó que el depuesto presidente se encuentra en Moscú, donde habría recibido asilo junto con su familia.
Abu Mohamed al Jolani, el líder islamista cuyos orígenes como militante están en el Frente Al Nusra, la filial siria de Al Qaeda, proclamó su victoria en un comunicado en el que pidió a sus seguidores tranquilidad y evitar abusos en las zonas bajo su control, como lleva haciendo desde que inició su ofensiva relámpago que ha abierto un nuevo paradigma geopolítico en todo Oriente Medio.