Bangladesh se mantiene sumergido en la violencia tras la dimisión y la salida del país de la primera ministra Sheikh Hasina, con enfrentamientos y gran agitación en las calles que han llevado el total de muertos a más de 400 en las últimas 24 horas.
Entre el lunes y este martes se confirmó el deceso de por lo menos 99 personas, lo que haría de esta una de las jornadas más letales desde que estallaron las protestas antigubernamentales el mes pasado.
El superintendente del Hospital General del distrito de Jashore Occidental, Harun-or-Rashid, dijo a EFE que 20 personas murieron quemadas después de que se incendiara un hotel, supuestamente propiedad de un líder de la Liga Awami, la formación de la ex primera ministra.
"También hemos tratado a un centenar de heridos y 30 de ellos se encuentran en estado crítico", indicó.
La violencia se ha mantenido en la calle durante días, pero se intensificó el lunes después de la dimisión de Hasina a pesar del llamamiento a la calma del Ejército, y los líderes estudiantiles.
Las protestas comenzaron a principios de julio después de que el Tribunal Supremo ordenara al Gobierno restablecer una cuota de empleo del 30% para los descendientes de los combatientes por la libertad de Bangladesh en la guerra de liberación de 1971, una medida que favorecía a los seguidores de Hasina.