En España, un niño de tan solo 8 años salió de la casa de su abuelo para ir a visitar a sus primos, que tenía 100 metros de distancia. Sin embargo, el niño desapareció sin dejar rastro alguno.
Si bien los familiares levantaron una intensa búsqueda por todo el barrio, no hubo ninguna pista que diera indicios del paradero del niño. De hecho, el caso se volvió viral a nivel nacional el 2018.
Pero 12 días después, el caso dio un vuelco: el cuerpo del niño fue hallado en la maleta del auto de Ana Julia Quezada, madrastra del niño.
Según consignó la policía, el traslado del niño a la casa de sus primos no tenía más 140 pasos en línea recta, de hecho solo tenía que cruzar un camino de tierra sin asfalto.
El caso también causó revuelo por cómo la acusada intentó desviar la atención para no ser inculpada. Y es que la policía había encontrado una polera del niño desaparecido en una zona boscosa y a 4 km. de donde fue visto. Lo llamativo fue que la mujer había sugerido ir a ese lugar.
A raíz de ello, la policía insertó micrófonos en el auto de la sospechosa para seguir sus pasos. En un "viaje relámpago" de la mujer, la policía la siguió y realizaron una revisión sorpresa: el cuerpo del niño estaba en la maleta del auto.
En concreto, la mujer había desenterrado el cadáver y lo había intentado trasladado a otro lugar. Si bien la mujer afirmó ser inocente, fue detenida igualmente.
La autopsia arrojó que la causa de muerte del menor de edad fue por estrangulamiento y que murió el mismo día que desapareció. Dos días después de la detención, la mujer confesó el crimen pero con incongruencias. Según ella, el niño intentó amenazarla con un hacha para que abandonara a su padre.
Supuestamente en ese forcejeo, la mujer le quitó el hacha y lo golpeó con la punta en la cabeza, luego, le tapó la boca para que dejara de insultarla, según ella. Además, señaló que su intención no era matarlo, sino que dejara de amenazarla.
Ana Julia Quezada se convirtió en la primera mujer que es condenada a prisión permanente, una pena similar a la cadena perpetua que propone un mínimo de 25 años de cárcel. Es decir, su causa recién podrá ser revisada en 2044.
