Este 5 de agosto, China lanzó con éxito una nave espacial experimental reutilizable en un cohete Larga Marcha-2F desde el Centro de Lanzamiento de Jiuquan, en el noroeste del país.
"Después de un período de operación en órbita, la nave espacial regresará a su sitio de aterrizaje programado en China. Probará tecnologías reutilizables y tecnologías de servicio en órbita según lo previsto durante su vuelo, brindando soporte tecnológico para el uso pacífico del espacio", según informa Xinhua, que no ofrece más detalles ni imágenes del lanzamiento.
La prueba orbital anterior de China de una nave espacial experimental reutilizable tuvo lugar en septiembre de 2020, y la nave espacial pasó poco menos de dos días en órbita. Lanzó una pequeña carga útil antes de aterrizar en China.
Si bien hay poca información sobre la misión, el proyecto parece encajar en los planes de desarrollo de transporte espacial descritos por CASC, el principal contratista espacial de China, y sus principales subsidiarias. Entre sus planes declarados figura el desarrollo de un acceso confiable y de bajo costo al espacio, incluidos vehículos de lanzamiento reutilizables y un avión espacial.