Al menos 33 gazatíes murieron, entre ellos 13 niños, en Yabalia, al norte de la Franja de Gaza tras el bombardeo de cazas israelíes a una residencia, en la que también se refugiaban desplazados, según informó la agencia oficial de noticias palestina, Wafa.
El bombardeo provocó la destrucción "total de la casa", donde todavía varias personas siguen bajo los escombros e hirió a varios más que fueron trasladados al Hospital Bautista.
El Ejército israelí, por su parte, indicó hoy que su operación en Yabalia prosigue y que durante el último día mataron a decenas de milicianos y desmantelaron sitios de "infraestructura terrorista".
"Las tropas también localizaron armamento y un pozo de túnel en Beit Lahia", aseguraron en el comunicado.
Norte de Gaza, la zona más afectada
El norte del enclave sigue siendo el punto más castigado por las tropas israelíes desde principios del pasado mes de octubre cuando retomaron su ofensiva bajo la tesis de que Hamás estaba intentando reagruparse en la zona.
Desde entonces, al menos 1.800 personas han muerto en el norte de la Franja, que engloba Yabalia y su campo de refugiados, Beit Lahia y Bei Hanoun, según la última cifra oficial publicada por las autoridades palestinas el pasado martes.
Este sábado el jefe del Estado Mayor del Ejército de Israel, Herzi Halevi, aseguró que sus tropas han matado a unos 1.000 milicianos palestinos durante su ofensiva en la zona. "Es un logro significativo que supone un duro golpe para Hamás", dijo Halevi.
Estimaciones de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), señalan que entre 75.000 y 95.000 personas siguen en la zona asediada del norte de la Franja, mientras que decenas de miles han tenido que huir a la ciudad de Gaza a causa de los ataques israelíes. Sólo en Yabalia y su campo de refugiados, que albergaba la mayor población entre las tres ciudades asediadas, 70.000 personas huyeron a la capital o se desplazaron a Beit Lahia o Beit Hanoun tras la entrada de las tropas israelíes.